La Iglesia de Jesucristo y Cáritas de San Cristóbal pusieron en marcha un proyecto en comunidades tsotsiles para combatir la desnutrición infantil mediante acciones de nutrición, salud comunitaria y autosuficiencia alimentaria
AquíNoticias Staff
La desnutrición infantil sigue siendo un reto en México: la talla baja en menores de 5 años tiene una prevalencia del 16.2%, mientras que más del 3.5% de la población infantil presenta bajo peso, cifras que impactan especialmente en comunidades rurales y vulnerables de estados como Chiapas.
Ante esta realidad, La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días realizó una donación a Cáritas de San Cristóbal de las Casas, con el objetivo de combatir la desnutrición crónica durante los primeros años de vida de niños tsotsiles en el municipio de Aldama, Chiapas.
El proyecto liderado por Cáritas contempla acciones como:
- Evaluaciones antropométricas y de hemoglobina.
- Detección y tratamiento de anemia.
- Distribución de alimentos enriquecidos y multivitamínicos.
- Talleres de nutrición, higiene y salud comunitaria.
- Capacitación en agricultura agroecológica y conservación de semillas.
- Promoción de huertos caseros y prácticas sostenibles para garantizar la autosuficiencia alimentaria.
Cáritas de San Cristóbal, con experiencia en programas de salud y desarrollo rural desde 2017, aporta un enfoque respetuoso de las tradiciones indígenas, lo que ha sido clave para generar cambios positivos y sostenibles en la región.
Mediante esta colaboración, la Iglesia de Jesucristo reafirma su compromiso con las causas humanitarias y el bienestar de las comunidades más vulnerables, contribuyendo a transformar vidas desde la raíz con proyectos que fortalecen la salud, la nutrición y la dignidad de las familias.
