Hasta julio de este año han ingresado al estado 229 mil 379 migrantes de distintas nacionalidades, superando las estadísticas de los dos años anteriores; el incremento en la llegada de migrantes está generando una fuerte presión sobre los recursos y servicios en el estado, principalmente en ciudades como Tapachula
Aquínoticias Staff
La migración en Chiapas ha alcanzado niveles sin precedentes en 2024, reflejando un fenómeno que continúa creciendo año tras año. Según datos de la Unidad de Política Migratoria, Registro e Identidad de Personas (UPMRIP), hasta julio de este año han ingresado al estado 229 mil 379 migrantes de distintas nacionalidades, superando las cifras de los dos años anteriores. La mayor parte de estos migrantes proviene de Centroamérica, Sudamérica, África y diversas islas, en su mayoría buscando mejores oportunidades o huyendo de condiciones adversas en sus países de origen.
El aumento en el flujo migratorio ha sido evidente: un 24% más que en 2023 y un asombroso 80% en comparación con 2022. En 2023, Chiapas ya había registrado una cifra notable de 229 mil 379 personas, lo que representó un incremento de más del 50% respecto al año anterior, cuando 152 mil 448 migrantes habían cruzado la frontera sur del país. Esta tendencia al alza, sin embargo, no anticipaba el dramático repunte que se viviría en 2024.
Factores detrás del aumento migratorio
El fenómeno migratorio en Chiapas es multifactorial. La pobreza extrema, la violencia de pandillas, los conflictos políticos y el cambio climático son algunas de las principales razones por las que miles de personas están abandonando sus hogares. Países como Honduras, El Salvador, Venezuela y Haití han sido particularmente afectados, lo que ha provocado que muchas personas busquen refugio en México o traten de llegar a Estados Unidos.
Irineo Mujica, director de Pueblo Sin Fronteras, señaló que la situación en Chiapas podría empeorar en los próximos meses debido a la implementación de la CBP One, una herramienta digital que facilitará la gestión migratoria en Tapachula. “Esta medida va a incentivar la migración y llegarán muchas más personas que están varadas en el Darién”, afirmó Mujica, en referencia al tapón del Darién, una de las rutas más peligrosas en el continente para migrantes. Además, advirtió que «con la Forma Migratoria Múltiple y los traslados hacia la puerta de entrada, el flujo de personas será mucho mayor en los últimos meses del año.»
Impacto económico y social en Chiapas
El incremento en la llegada de migrantes está generando una fuerte presión sobre los recursos y servicios en el estado. Las principales ciudades fronterizas como Tapachula y Suchiate se han visto desbordadas, con refugios llenos, saturación en las oficinas del Instituto Nacional de Migración (INM) y una creciente demanda de servicios básicos, como atención médica y vivienda temporal. A nivel social, se ha reportado un incremento en la tensión entre migrantes y las comunidades locales, principalmente debido a la competencia por empleo y los limitados recursos disponibles.
En términos económicos, aunque la migración ha representado una fuente de empleo temporal para algunos habitantes de la región, también ha complicado el acceso a ciertos subsidios y apoyos gubernamentales para las comunidades locales. Esto ha generado críticas hacia las políticas migratorias actuales y la respuesta del gobierno tanto estatal como federal.
El reto de gestionar la crisis
El gobierno de México, a través de diversas iniciativas, ha tratado de manejar el creciente flujo migratorio en Chiapas, pero enfrenta un panorama complejo. Las políticas de contención en la frontera sur no han logrado frenar el número de personas que ingresan al país. Además, el futuro de las políticas migratorias de Estados Unidos, como la CBP One y la política de asilo humanitario, influirá directamente en la cantidad de migrantes que seguirán cruzando por Chiapas en su intento por llegar al norte.
El desafío para las autoridades mexicanas no solo es proveer de los recursos suficientes para atender a la población migrante, sino también encontrar un balance que evite desestabilizar la economía local y agudizar las tensiones sociales.