Los asesinatos son la expresión de la exclusión, los prejuicios y el odio irracional; Chiapas es una de las entidades donde se han registrado más asesinatos a mujeres transexuales, de acuerdo con información de activistas, defensoras y organizaciones de derechos humanos
Portavoz Staff
[dropcap]S[/dropcap]er diferente parece ser sinónimo de odio; los asesinatos son la expresión de la exclusión y Chiapas es una de las entidades donde se han registrado más transfeminicidios, de acuerdo con información de activistas, defensoras y organizaciones de derechos humanos.
En octubre del año pasado, se alertó que de nueva cuenta en el estado se incrementó la violencia de género. La suma, hasta esa fecha, fue de 42 feminicidios y siete asesinatos de mujeres transgénero, de acuerdo con datos aportados por el Colectivo de Mujeres y por el Observatorio de Violencia de Género.
Itzel Durán es sólo uno de los casos de transfeminicidios en la entidad. Era una joven de 19 años que fue asesinada en el interior de su casa en el municipio de Comitán de Domínguez, la madrugada del sábado 8 de octubre de 2016.
El asesinato de Itzel se cometió días después de que Paola Ledezma, otra joven transexual, fuera asesinada en la Ciudad de México por un hombre que contrató sus servicios como trabajadora sexual.
A propósito de la colocación de una ofrenda en memoria de esta última, la defensora de los derechos humanos de ese sector de la población, Kenya Cuevas, manifestó que en lo que va del año la organización Letra S ha documentado al menos 50 asesinatos de mujeres transgénero en el país, según información de La Jornada.
La transfobia es un tema crítico porque «la verdad es que nos siguen matando», añadió. Expuso que en la capital del país se han reportado casi la mitad de los homicidios, 22 hasta el momento.
Ante estos crímenes, la respuesta de las autoridades para resolver los casos denunciados sigue siendo omisa, aseguró Kenya Cuevas. «El caso de Paola fue emblemático. La verdad es que por eso hemos tenido mucho impacto, pero en los demás casos no».
«Hay muchos en los que ni siquiera en los lugares donde se cometen los crímenes hay cámaras. No hay una persona a quién buscar. Tampoco hay protocolos para la seguridad de las trabajadoras sexuales y mujeres trans», expuso la activista.
Subrayó que son muy pocos los asesinatos que se resuelven, y que en la mayoría de los más recientes crímenes responsabilizan el acto a las parejas de las mismas. «(…) Se me hace difícil de creer que en 10 homicidios seguidos sean las parejas quienes las hayan matado».
Marbella, activista transgénero, añadió que además de Chiapas, los estados con más transfeminicidios son Veracruz, Guerrero, Tabasco, Chihuahua y Durango.
A nivel continental, México ocupa el segundo lugar en transfeminicidios con 247 casos ocurridos entre el 1 de enero de 2008 y el 30 de abril de 2016, justo por debajo de Brasil donde se han registrado 845, según el «Proyecto Transrespeto versus Transfobia en el Mundo».
«La lucha sigue por nuestros derechos. Aquí estamos, trabajadoras sexuales trans, para exigir justicia», expresó.
