Musgos «navideños», no extraigas, no vendas, no compres

Arreglar los tradicionales pesebres tiene un alto costo para el medio ambiente. Conoce la importancia de estas microplantas y la necesidad de evitar su comercio y consumo

Lucero Natarén / Aquínoticias

Al utilizar musgos o henos para adornar tu hogar y los tradicionales «nacimientos» en estas épocas decembrinas, se promueve la contaminación del medio ambiente y la erosión del suelo, razón por la cual no se deben de extraer, vender o comprar.

Los musgos cumplen funciones fundamentales en la naturaleza, por ejemplo, son capaces de retener de 10 a más veces su propio peso en agua, disminuyendo la erosión del suelo y la evaporación, además de favorecer la infiltración de agua al subsuelo, de acuerdo al portal de Ciencia de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Sus servicios ambientales también abarcan el ser «esponjas», devolviendo al suelo los minerales disueltos en las aguas de lluvia, además de proteger de inundaciones violentas, entregando agua constante a los ríos y arroyos en verano.

Así mismo, los musgos captan una importante cantidad de bióxido de carbono de la atmosfera, gas relacionado con el efecto invernadero y el calentamiento global.

Cabe destacar que también sirven como germinadores de semillas de otras plantas, es hogar de flora y fauna. Son una especie de lento crecimiento (hasta siete años) y sensibles, pues cualquier alteración de hábitat puede hacerlos desaparecer rápidamente.

De lo anterior surge la necesidad de la protección de los musgos y otras briófitas (plantas sin vasos vasculares ni flores ni frutas que se dan en los bosques húmedos) tales como el heno (barba de palo) y los helechos arborescentes (troncos de helecho), sin embargo, eso no significa que deban morir las tradiciones, sino por el contrario, adoptar un sentido más ambiental y de protección.

Existen alternativas para decorar los tradicionales «nacimientos» o realizar adornos navideños sin poner en riesgo a estas especies. Aserrín natural, arena, piedritas, aserrín pintado, papel, cartón, tela, yute y todos aquellos materiales que tu imaginación te indique, pueden ser grandes alternativas, además de que será una oportunidad para dar un buen ejemplo a los más pequeños del hogar.

 

 

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