EZLN reta al gobernador
En lo que pareciera un franco reto a las autoridades gubernamentales el denominado Ejército Zapatista de Liberación Nacional se movilizó en las últimas horas alegando justicia y respeto a los derechos humanos indígenas y a la tenencia de la tierra, cuando se puede entender que detrás o en el trasfondo de las movilizaciones de este grupo facineroso se encuentra la oposición a la construcción de la súper carretera Palenque-San Cristóbal de las Casas.
Y es que fue precisamente la noche de este viernes cuando cientos de milicianos bases de apoyo del grupo armado comenzaron a concentrarse en el campamento del “Caracol V”, ubicado en el ejido Roberto Barrios en el municipio Palenque.
A decir de expertos en el tema no se descarta que puedan iniciar acciones de protestas en las próximas horas incluyendo bloqueos carreteros y marchas
Este grupo ha manifestado su determinación de no permitir desalojos en los ejidos autónomos argumentando que “son territorios legítimamente suyos, con el lema ni un paso atrás en la defensa territorial zapatista” han dejado en claro su desafío tanto al gobierno federal como al estatal
Es por ello, que el gobernador Eduardo Ramírez Aguilar, debe ser severo contra ese grupúsculo que se oponen a la construcción de la autopista Palenque-San Cristóbal de las Casas.
Allí debe actuar con todo apego a la ley los llamados PAKALES, están obstruyendo la obra pública. Eso sí es verdaderamente lamentable y debe ser penalizado porque con sus nefastas acciones, no molestan solamente al gobierno federal y estatal, sino al pueblo de Chiapas en general, obstruyendo el desarrollo económico de todo los chiapanecos.
Hay que decirlo. Esas pandillas de rufianes que se apodan zapatistas, deben desenmascararse porque ni son ejército, no son zapatistas y menos que sean la liberación nacional, simplemente son grupos del crimen organizado que se les está obstruyendo oscuros intereses políticos y económicos, a los cuales se les debe aplicar la ley sin contemplación alguna.
Estos sujetos, son personas que, si no se someten al orden, seguramente tendría que culparse al gobierno federal y estatal como un tibio, tolerante que no busca el bien común de los chiapanecos sino los intereses personales y de grupo.
Porqué oponerse a la presencia de la Guardia Nacional en la zona. No es de ellos el territorio, es de todos los chiapanecos y no de una pandilla. Qué hay detrás de ese mezquino interés de no acceso a las autoridades.
Ya tuvieron más de 20 años de explotación de sus personales intereses, sino en ese tiempo no hicieron lo que desean prolongar, la ley debe aplicárseles.
Tras de esas personas, están los pseudo ambientalistas, las denominadas Organizaciones no Gubernamentales bien financiadas por intereses ajenos y oscuros al bienestar común, y por ello, la importancia de que los gobiernos de los tres niveles actúen de inmediato. Los alcaldes de las regiones por donde está trazada la autopista, conocen perfectamente a los que ya han sacado la cabeza y hasta los intelectuales.
