¿Y la Fiscalía para periodistas?
En los últimos 5 años desde el púlpito de la mañanera se ha impulsado una campaña de animadversión, y quizás hasta de odio hacia los periodistas en el país. Los resultados están a la vista y no conviene ya ni siquiera comentar las cifras.
En este marco, Chiapas no ha sido la excepción, pero con la característica de que los periodistas y comunicadores trabajan prácticamente en la indefensión ante la inexistencia de una Fiscalía especializada para la atención de delitos contra periodistas.
Sí antes la hubo, hoy se ha degradado a una simple dirección para la defensa y protección de las periodistas, cuyos alcances son mínimos lo que ocasiona que estos queden prácticamente desprotegidos en un escenario de violencia generalizada.
En septiembre del 2008 el periodista el periodista Mario Gómez fue asesinado a balazos en Yajalón. si bien se detuvo a los autores materiales hasta el momento se desconoce a los autores intelectuales de este hecho.
Tres años más tarde el 28 de octubre en San Cristóbal de las Casas el periodista Freddy López Arévalo fue asesinado a balazos prácticamente en la entrada de su domicilio. Igual que en el caso anterior se desconoce el origen del actor intelectual.
El 2 de febrero en la capital chiapaneca los periodistas Rodolfo Flores y Argenis Esquipulas fueron agredidos por un presunto elemento de la Guardia Nacional cuando cubrían una manifestación de estudiantes de la escuela normal rural Mactumactzá. En esa ocasión los periodistas agredidos contaron con el apoyo de sus compañeros; sin embargo, a pesar de que se presentó la denuncia ante las instancias correspondiente se desconoce el avance de las mismas y mucho menos si se sancionó o no al agresor, plenamente identificado.
El 31 de mayo un grupo de comunicadores de San Cristóbal de las casas fueron también agredidos e inclusive a uno de estos les fue arrebatado su equipo de trabajo cuando cubrían una marcha de socios de la caja de ahorro San Juan Bosco en aquel municipio.
Y recientemente el pasado 21 de agosto el periodista Ariel Grajales fue agredido a balazos en su domicilio en Villaflores sin que hasta el momento se tenga mayor información al respecto.
Por todo ello la pregunta es y dónde está la Fiscalía especializada para la atención de delitos cometidos en contra de periodistas que de una u otra forma garantizaba la salvaguarda a la integridad física de los periodistas y su familia.
El escenario que se impulsa desde Palacio Nacional al estigmatizar a los periodistas como enemigos del Gobierno en turno da pie a las agresiones en contra de comunicadores, cuyas agresiones a estos generalmente quedan en la más completa impunidad ante la falta de mecanismos judiciales que permitan el castigo y la sanción de quienes atenten en contra de estos.
La Fiscalía Especial para la atención de delitos cometidos contra periodistas fue creada originalmente por un acuerdo de la entonces Procuraduría General de la República en el 2006, con el fin de garantizar la seguridad patrimonial de los periodistas en México, para que desarrollen a plenitud su libertad de expresión. Pero en Chiapas, todo se reduce a una simple dirección.