PAN se reconfigura: Romero rompe con el PRI y promete “apertura total”

El blanquiazul busca “ciudadanizarse” y recuperar identidad tras años de declive; su dirigencia anuncia el fin de las alianzas automáticas y un nuevo proceso de afiliación digital

AquíNoticias Staff

En un acto que marca un punto de inflexión para la oposición mexicana, el dirigente nacional del Partido Acción Nacional (PAN), Jorge Romero Herrera, reunió este jueves a senadores, diputados, alcaldes y liderazgos panistas en el auditorio Manuel Gómez Morín de la sede nacional, para delinear lo que llamó el “relanzamiento total del blanquiazul”.

La primera línea de ese plan es contundente: “apertura total”. Romero busca “ciudadanizar” al PAN, devolverlo a sus raíces fundacionales de 1939 y abrir las candidaturas a personas sin militancia. “Queremos un PAN que vuelva a ser el instrumento de los ciudadanos, no de las cúpulas”, expresó durante su discurso ante una sala repleta de cuadros legislativos y exdirigentes.

La segunda línea implica lo que en los hechos significa una ruptura con el PRI, su socio electoral en los últimos años. Sin mencionarlo de manera directa, Romero aludió a que el partido debe caminar solo y reconstruir su identidad propia, mientras que la tercera directriz apunta a agilizar el ingreso de nuevos militantes mediante un proceso digital que, según explicó, “se resolverá con un clic”.

El evento, que contó con la presencia de Ricardo Anaya, José Elías Lixa, Kenia López Rabadán y Damián Zepeda, funcionó como anticipo de la asamblea constitutiva del sábado en el Frontón México, donde se dará a conocer el plan de acción que culminará con la reforma de estatutos en noviembre.

A un año de haber asumido la dirigencia nacional, Romero enfrenta un diagnóstico crítico: pérdida de identidad, fractura de liderazgos y una declinación electoral que amenaza con dejar al PAN fuera del mapa político nacional.

El exdirigente Luis Felipe Bravo Mena, figura histórica del panismo, advirtió sin rodeos:

“Si el PAN no hace algo, entra ya a su fase de desaparición. No es posible continuar en esta línea de declinación electoral permanente. Tenemos que revisar todo, y todo es todo. No hay nada escrito en piedra.”

Bravo Mena sostuvo que, frente “a un régimen prácticamente autoritario”, el PAN debe organizar ciudadanos más allá de las urnas, y repensar sus alianzas:

“Nos estamos inclinando por revisar la política de alianzas, particularmente con el PRI. Como principio no, pero podría haber excepciones en casos específicos. Yo me inclino por esa vía: ser nosotros mismos y ganar nuestra identidad.”

En el mismo tono, Roberto Gil Zuarth lanzó un mensaje directo a la militancia:

“Ya llegó la hora de apostar por nosotros mismos. El PAN no va a ir a la cola de ninguna alianza: debe encabezar la alternativa al régimen hegemónico de Morena.”

El discurso de Romero y las voces de los exdirigentes coinciden en un diagnóstico común: el PAN necesita renacer o resignarse a desaparecer. Con este relanzamiento, Acción Nacional pretende volver a la calle, abrir sus puertas y reconstruir su capital moral.

La asamblea del sábado será, en los hechos, el primer examen de fuerza del nuevo liderazgo panista: entre la nostalgia de sus principios y la urgencia de reinventarse.

Vía Reforma

Compartir:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *