Te contamos en qué consiste el prototipo que fue presentado a través de la revista especializada Nano Letters
Lucero Natarén/ Aquínoticias
La producción masiva de plásticos ha hecho que el entorno esté saturado por completo y es que, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), anualmente se producen más de 400 millones de toneladas de plástico en el mundo, donde solo el 9 por ciento es reciclado, terminando el resto en vertederos o esparcido en el medio ambiente.
Estos residuos se convierten en micropartículas que contaminan el agua y el aire, pasando a los organismos vivos, especialmente a la fauna marina, haciendo que estos microplásticos sean ingeridos por los seres humanos. Actualmente se han encontrado estas partículas dañinas en lugares inesperados, como en la placenta y sangre humana.
Ante este escenario, es necesario buscar soluciones emergentes. De hecho, la ciencia está en ello. Especialistas del Instituto de Investigación de Polímeros de la Universidad de Sichuan, en China, han creado una revolucionaria solución que podría reducir la cantidad de microplásticos de los mares y ríos.
De acuerdo con el artículo publicado en la revista especializada Nano Letters, se trata de pequeños robots en forma de pez que tienen la capacidad de absorber microplásticos a través de su cuerpo suave y flexible mientras navegan por el agua. Miden solo 1.3 centímetros de largo y están adaptados para nadar a una velocidad de 30 milímetros por segundo. El robot utiliza un sistema láser de luz infrarroja (que tiene en su cola) que le permite guiarse por lo que puede nadar en todas direcciones, además de ser autopropulsado.
El pez robótico es capaz de cargar hasta 5 kilogramos de peso, pese a su diminuto tamaño. Por otro lado, es muy flexible y resistente por estar creado por elastómero con nanoestructuras de gradiente basadas en grafeno sulfonado. Debido a los materiales con los que está hecho, las micropartículas interactúan químicamente con la estructura del pez, lo que hace que los microplásticos sean atraídos y atrapados.
De momento, las características de los peces solo funcionan en aguas superficiales, pero esperan los científicos desarrollar más innovaciones para alcanzar las profundidades del mar.
Si bien es cierto esto no genera una solución de razón y se tendría que investigar más sobre cómo podrían estos peces robóticos interferir en los ecosistemas marinos, los peces se convierten en una esperanza que podría aplicarse ante un grave problema.