Con la disminución del 60% de la flota pesquera, se ve amenazada la subsistencia de las familias que dependen de esta actividad económica, así como de la captura de productos del mar; señalan que los apoyos gubernamentales han sido insuficientes para rescatar al sector pesquero
Aquínoticias Staff
El sector pesquero de Chiapas enfrenta una de sus peores crisis en décadas. Con una disminución del 60% en la flota pesquera, más de mil familias que dependen de esta actividad ven amenazada su subsistencia. Abraham Solís Cruz, presidente de la cooperativa Moluscos y Crustáceos del Sur de Chiapas, lanzó un llamado urgente a la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, y al senador Eduardo Ramírez Aguilar, solicitando acciones inmediatas para rescatar al sector pesquero chiapaneco.
La crisis de la pesca en Chiapas
Solís Cruz destacó que, durante años, ninguna autoridad de los tres órdenes de gobierno ha atendido de manera efectiva las demandas del sector pesquero, lo que ha llevado a su colapso. “La producción pesquera en Chiapas se ha visto disminuida sustancialmente por la falta de apoyo de los programas federales y estatales», declaró, haciendo énfasis en que las promesas hechas por los gobiernos actuales no se han traducido en acciones concretas.
Esta situación se agrava con la falta de recursos y la caída en las capturas, afectando no solo a la industria, sino también a las economías locales que dependen de ella. Chiapas, con una vasta línea costera y rica biodiversidad marina, alguna vez fue un importante productor de pescados y mariscos. Sin embargo, en los últimos años, la falta de inversión en infraestructura y tecnologías de pesca ha llevado a una disminución significativa en la actividad, reduciendo la capacidad productiva del estado.
Desatención gubernamental y pobreza en el sector pesquero
Uno de los principales problemas que enfrenta el sector es la falta de políticas públicas eficaces para apoyar a los pescadores. Solís Cruz lamentó que, a pesar de la existencia de programas federales, los recursos destinados no han sido suficientes para hacer frente a los desafíos. “El apoyo que hemos recibido, de 7 mil 500 pesos anuales, no es suficiente para mantener a nuestras familias», aseguró, resaltando la insuficiencia de esta ayuda en un contexto de creciente pobreza y marginación en las comunidades pesqueras.
De acuerdo con datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), en 2022, el 72.2% de la población en Chiapas vivía en condiciones de pobreza. La situación es particularmente grave en las zonas rurales, donde se concentran muchas de las familias dedicadas a la pesca. La falta de recursos para renovar las embarcaciones, la falta de acceso a tecnologías sostenibles y la carencia de infraestructura básica han contribuido a la creciente migración de pescadores hacia otros sectores o estados en busca de mejores oportunidades.
Urgente intervención de las autoridades
El llamado de los pescadores chiapanecos llega en un momento clave de transición política en el país. La presidenta electa, Claudia Sheinbaum, y el senador Eduardo Ramírez Aguilar, tienen ante sí el reto de atender un sector que ha sido históricamente marginado. Según Solís Cruz, la situación seguirá empeorando si no se toman medidas inmediatas. “Necesitamos que las dependencias encargadas de apoyar a la pesca volteen los ojos hacia nosotros», reiteró, solicitando que tanto los gobiernos estatal como federal asuman su responsabilidad para garantizar la reactivación económica del sector.
El sector pesquero ha sido uno de los principales motores económicos de la región, generando empleos directos e indirectos y contribuyendo al desarrollo de las comunidades costeras. Sin embargo, la falta de inversión en infraestructura, el acceso limitado a créditos y programas de modernización, así como los efectos del cambio climático en los ecosistemas marinos, han golpeado duramente la producción pesquera en Chiapas.
El impacto económico y social
La crisis en el sector pesquero no solo afecta a los pescadores y sus familias, sino también al resto de la cadena productiva, desde los distribuidores hasta los mercados locales. La pesca ha sido tradicionalmente una fuente importante de empleo en la región, y su colapso está profundizando los problemas de pobreza y exclusión social.
La migración forzada de pescadores hacia otros sectores es un reflejo de la desesperación en la que viven. Muchos han abandonado sus oficios ancestrales para buscar empleo en la agricultura, la construcción o incluso han emigrado a otras partes del país. Esta fuga de capital humano tiene consecuencias negativas para el desarrollo de las comunidades costeras, que pierden no solo fuerza de trabajo, sino también conocimientos tradicionales vinculados a la pesca sostenible.
Expectativas y Soluciones Propuestas
La presidenta electa, Claudia Sheinbaum, ha prometido implementar políticas públicas que prioricen a los sectores productivos más vulnerables. Los pescadores chiapanecos esperan que esto se traduzca en acciones concretas para revitalizar la pesca en la región. Entre las principales demandas del sector se encuentran:
- Inversiones en infraestructura y modernización de la flota pesquera: Es necesario renovar las embarcaciones y mejorar las tecnologías de pesca para aumentar la productividad y reducir el impacto ambiental.
- Programas de apoyo económico más robustos: Los pescadores han expresado que el apoyo actual es insuficiente. Se requiere de una reestructuración de los programas federales y estatales para asegurar una asistencia financiera acorde a las necesidades del sector.
- Incentivos para la pesca sostenible: La protección de los ecosistemas marinos es fundamental para garantizar la viabilidad a largo plazo de la pesca en Chiapas. Programas de capacitación en técnicas de pesca sostenibles podrían ayudar a preservar los recursos naturales y mejorar las condiciones de trabajo.
Con información de Diario del Sur