Dania Ravel, consejera del INE, advierte sobre los riesgos de la concentración de poder en la figura de la consejera presidenta, tras un nombramiento sin consulta al Consejo General
Aquínoticias Staff
La designación de Guadalupe Taddei como consejera presidenta del Instituto Nacional Electoral (INE) ha generado controversia tras ejercer una nueva facultad que le permite realizar nombramientos en Unidades Técnicas y Direcciones Ejecutivas sin consultar al Consejo General. Dania Ravel, consejera del INE, ha sido una de las voces más críticas, señalando que esta medida atenta contra la pluralidad y la democracia interna del organismo.
El pasado 21 de febrero, Taddei designó a José Luis Arévalo Romo como titular de la Unidad Técnica de Transparencia y Protección de Datos Personales, utilizando la atribución que le confirió la reciente reforma judicial. Ravel destacó que este nombramiento “rompe con las designaciones colegiadas que existían desde la época del IFE”, subrayando que la concentración de poder en una sola persona pone en riesgo la legitimidad y la transparencia del instituto.
Arévalo Romo, quien anteriormente se desempeñó como director de información en la Coordinación Nacional de Comunicación Social del INE, carece de experiencia en protección de datos personales y transparencia, a diferencia de su predecesora, Sendy Murillo. Su trayectoria incluye cargos en la Secretaría de Gobernación y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, lo que ha generado dudas sobre su idoneidad para el puesto.
Ravel advirtió que esta práctica podría propiciar decisiones discrecionales y poco democráticas, alejándose del espíritu colegiado que ha caracterizado al INE. “La sustitución de atribuciones colegiadas por una única visión, independientemente de quién la ejerza, pone en riesgo la pluralidad y la confianza en el instituto”, afirmó.