Informe ERA
Se cumplió el primer año de ejercicio del gobernador Eduardo Ramírez Aguilar, un personaje que está en la palestra nacional, ha sido capaz de transformar a Chiapas, pese a que hay muchos que quieren poner obstáculos e impedir que la entidad salga adelante, que haya todo menos concordia y desarrollo.
El primer año, se reflejó en el informe que rindió en el Centro de Convenciones, ahí se mostró músculo, riqueza intelectual, fuerza social, quedó claro que el mandatario no tiene amigos, sino aliados que suman por lo menos 5 millones, ellos están ahí, aplaudiendo, saludando, buscando la foto, porque son parte de este proyecto.
Y sí, el Gobierno de Eduardo Ramírez Aguilar, marca un punto de inflexión en la vida pública de Chiapas. Más allá del cumplimiento administrativo, que ha sido claro en rubros específicos, el mandatario expuso una visión política que apuesta por la reconciliación social, el desarrollo incluyente y la construcción de un Estado moderno; su mensaje refleja un gobierno que busca fortalecer la confianza ciudadana mediante resultados concretos en áreas estratégicas.
Días antes había manifestado en un acto de transporte que, no va a permitir que nadie vulnere la tranquilidad del pueblo, incluso hay miles de detenidos producto de la pacificación, del cierre al paso de la delincuencia organizada y común, porque nadie está por encima de la ley y menos aplastar los derechos ciudadanos.
Es ahí en esta materia, la de seguridad, Ramírez Aguilar destaca una disminución sostenida de delitos de alto impacto, producto de la coordinación entre corporaciones y la inversión en capacitación policial, con el apoyo de las fuerzas armadas del país, su enfoque privilegia la proximidad social, entendiendo que la tranquilidad es condición indispensable para el desarrollo.
Quiero prestar atención en la inclusión, pues se consolida como uno de los pilares de su administración, con programas que atienden a mujeres, pueblos originarios y sectores históricamente marginados, el gobernador no está improvisando, ha estudiado bien las condiciones de Chiapas, este impulso se acompaña de políticas dirigidas a la juventud, brindando becas, espacios de emprendimiento y oportunidades educativas que fomentan la movilidad social.
La sociedad requiere de movilidad, y el gobernador apuesta por modernizar el transporte público, mejorar la infraestructura vial y ordenar el sistema para garantizar seguridad y eficiencia; la autopista va, como el mejoramiento de los caminos y carreteras estatales, hoy va con y por todo a favor de la ciudadanía.
La educación avanza con obras escolares, equipamiento tecnológico y capacitación docente, sobre todo, sacar el atolladero a miles de personas con el tema del analfabetismo, educar, es decir no más perjuicio a los chiapanecos, un pueblo educado, es virar hacia un puerto de desarrollo.
Mientras que en salud se observa una ampliación de servicios y rehabilitación, si bien es cierto, se ha apoyado del gobierno de Sheinbaum, también es cierto que, esto muestra una comunión entre ambos gobernantes, ellos están con Chiapas, no por Chiapas; porque es el momento de justicia para los 5.5 millones de personas.
La inversión en infraestructura evidencia una estrategia de largo plazo: carreteras, obras hidráulicas y espacios comunitarios que impactan directamente en la calidad de vida. La obra no del sexenio, sino del siglo, será la autopista moderna de la Selva, que hará más fuerte la economía de la zona.
Al mismo tiempo, la cultura recibe un impulso especial, con festivales, apoyo a artistas locales y fortalecimiento del patrimonio, el jefe del ejecutivo, es puntual, si no amamos a Chiapas, de nada sirve trabajar, se impulsa con cada acto donde se da importancia a los municipios, demostrando la grandeza de esta entidad.
En conjunto, el informe proyecta un gobierno con rumbo definido, enfocado en elevar el bienestar y en consolidar un Chiapas más próspero, seguro y justo, tal como lo demandó desde años atrás, quizás desde los años 70s, hasta llegar a la aparición del Ejercito Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).
Mención aparte vale citar que, en los Ayuntamientos hay personas de diversos partidos políticos, ninguno niega el trabajo real del gobernador, y él, trabaja con todos, porque no son siglas ni colores partidistas, son ciudadanos que están ansiosos de cambios reales y duraderos.
Pero que opinan los ciudadanos, la respuesta es sincera y sencilla, ellos argumenta que hay seguridad, pese a todo, que hay libertad, hay turismo, economía, hay un cambio efectivo, hay lo que tiene que haber, de ahí que todos están satisfechos con estas acciones y esperan que siga adelante por el bien de todos.
Ahora bien, ¿qué le falta a Chiapas?, seguramente el hecho de que todos salgamos no a manifestarnos, sino desde los hogares a trabajar por la paz, y eso se hace con educación, valores, ética con responsabilidad y porque no, hasta con un sentido religioso, es ahora el camino a tomar.
Los hijos y esposos, podrán trabajar con esa unidad familiar, para que no haya más ideas negativas de bestialidad entre conciudadanos, donde los enemigos de Chiapas, terminen siendo castigados y la gente buena, pueda retornar a las horas serenas y de mucho trabajo para la reconstrucción de lo más bello que se tiene.
Vale la pena, anotar los anuncios que se dieron por parte del mismo gobernante, que va a un cero corrupción, lo cual no es solamente el tema de robo a la población desde las dependencias, sino del gobierno ser honesto y decir ningún moche, no hay diezmos, solo mejorar las obras y aumentar el trabajo.
También dejó en claro Eduardo Ramírez que, habrá una conectividad, todo para el siguiente año, que dicho sea de paso, estamos a la vuelta de la esquina, pero sin duda, enfatizó que su gabinete ha hecho bien las cosas, pero les dejó bien claro, quiere que redoblen el paso, por el bien de Chiapas.








