Los refugios en la frontera son un salvavidas para miles de migrantes, pero enfrentan crecientes ataques políticos y amenazas de investigación bajo el regreso de Donald Trump a la presidencia
Aquínoticias Staff
Cuando Roselins Sequera y su familia llegaron a Estados Unidos desde Venezuela, encontraron refugio en un albergue de Texas que les ofreció un lugar seguro, comida y apoyo para continuar su travesía. Como ellos, miles de migrantes dependen de estas organizaciones sin fines de lucro que operan en estrecha colaboración con la Patrulla Fronteriza. Sin embargo, el panorama humanitario podría cambiar drásticamente con el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca.
Los refugios no solo brindan asistencia inmediata, sino que también ofrecen orientación legal y apoyo logístico. Caridades Católicas del Valle del Río Grande, por ejemplo, ha asistido este año a cerca de 50,000 migrantes en McAllen, Texas. A pesar de su labor esencial, figuras como Tom Homan, el nuevo zar fronterizo designado por Trump, han cuestionado estas iniciativas, acusando a las ONG de “abonar a la crisis migratoria”.
El clima político también se ha endurecido a nivel estatal. Desde 2022, el gobernador de Texas, Greg Abbott, ha iniciado investigaciones contra seis organizaciones humanitarias, incluyendo a Caridades Católicas. Aunque no se han presentado pruebas concretas, estas acciones buscan desacreditar la labor de los refugios. “Es una expedición de pesca sin fundamento”, afirman los abogados del refugio, mientras defensores advierten sobre un ataque sistemático contra estas instituciones.
La hermana Norma Pimentel, directora de Caridades Católicas, se ha convertido en el blanco de estas acusaciones, lo que subraya las crecientes tensiones entre el activismo humanitario y las agendas políticas. A pesar de esto, líderes locales como el alcalde de McAllen, Javier Villalobos, han defendido el trabajo de los refugios, calificándolos como indispensables para evitar el colapso de las comunidades fronterizas. “Habríamos estado perdidos sin ellos”, enfatizó.
Para las familias migrantes, como la de Roselins Sequera, los refugios representan una oportunidad de reconstruir sus vidas. Gracias al apoyo recibido, lograron avanzar hacia Iowa, donde esperan un futuro mejor. Sin embargo, el destino de estas instituciones pende de un hilo, amenazado por investigaciones políticas y recortes presupuestarios promovidos por figuras como Vivek Ramaswamy y Elon Musk, quienes ven estas ayudas como un “desperdicio de recursos públicos”.
El debate sobre inmigración en Estados Unidos se intensifica, y los refugios migratorios se perfilan como un tema clave en esta discusión. Mientras tanto, miles de vidas dependen de su continuidad y del respaldo de una sociedad que apuesta por la justicia y la humanidad.
Con información de El Imparcial
