Muchos son los llamados pero poco los palomeados
Muchos son los actores políticos que andan en friega aquí en Chiapas –y en varias partes del país- pues el 2018 y las elecciones están a la vuelta de la esquina y claro que todos quieren estar en la jugada en la repartición del pastel; ya sea por considerar que cuentan con los méritos suficientes y tienen como aval un trabajo en bien de las masas, o ya sea porque el maridaje político da para eso y más.
De los más movidos, no todos tienen verdaderas posibilidades, dada las circunstancias y las formas de la política que actualmente se practica en la aldea, en donde todos quieren lo mismo y creen que por tener el aval de quienes manejan los hilos del poder en Chiapas, son inminentes candidatos y además ya caminan con aires de triunfalismo, olvidándose que en este escenario la sopa se cae cuando ya casi está en la boca.
En la misma puerta del cielo hay una escalera que conduce al infierno, así que nadie puede decir que «ya es» cuando aún comienza a escribirse la historia del proceso venidero, sobre todo cuando los acuerdos comúnmente se toman en las cúpulas, que es donde verdaderamente se eligen a quienes ocupan los cargos de elección popular. Particularmente creo que actualmente así es y que las movilizaciones, acarreos, compra de votos, tortas, refrescos, urnas, sufragios, etcétera, son sólo una simulación.
Sin embargo y de acuerdo a nuestro comentario inicial, los que andan ya bastante inquietos, desde hace varios días se les ve en distintos escenarios con sectores representativos de la sociedad y eso, sin duda, permitirá que los volteen a ver, y no sólo eso, sino que podrían hasta aparecer mejores posicionados. Éstos seguramente serán colocados en lugar de alguno, que a juicio de los árbitros de facto, no le alcance ni para aparecer en las encuestas. Lo cierto es que mientras unos andan muy movidos, otros a estas alturas ya andan más que preocupados, pues no más no levantan el vuelo.
En el caso del diputado Willy Ochoa, es evidente que su programa «empantalónate», le sirven para dos cosas; la primera es que un pantalón de mezclilla, como quiera que sea, le sirve a los varones para la chamba, como se dice entre la populacha; y la otra, es que el legislador aprovecha el acercamiento con los sectores más desprotegidos para presentar su proyecto político, y como él dice; «se trata de convencer a la gente», y vean si lo ha logrado, pues Willy Ochoa ganó el pasado proceso electoral para diputado local en la zona poniente, donde desde hace más de veinte años el PRI no ganaba.
Pero independientemente del trabajo que cada uno está realizando con miras a proyectarse a una candidatura, también hay que decir que en el marco de los acuerdos cupulares, Willy Ochoa Gallegos lleva mucha ventaja, pues la escuela beltronista tiene muchos pupilos y él ha sido uno de los que desde hace mucho han logrado posicionarse y estar en la jugada. Para muestras un botón, secretario de organización del CEN del PRI, precisamente con Manlio Fabio Beltrones, y por prelación llegó a ocupar la segunda posición más importante del PRI a nivel nacional que es la secretaría general y para que eso suceda se necesita tener una muy buena estrella.
A mi juicio, Willy Ochoa es una las piezas claves dentro del priismo chiapaneco, pues este instituto político en la entidad viene a la baja, sobre todo cuando su dirigente, Roberto Albores Gleason, se la pasa únicamente expidiendo nombramientos a personajes que ni oficio ni beneficio, como el reciente nombramiento a Bayardo Robles, que en lugar de sumar están fragmentando más a la militancia. La convocatoria para renovar la dirigencia es la exigencia de los priistas de Chiapas, pero al parecer, esto es lo que menos importa al diablito.
En los próximos días del PRI chiapaneco saldrán chispas, pues al diablito Gleason seguro se le aparecerá el mismo chamuco, pues no pretenderá que en la 22 asamblea nacional ordinaria del PRI lo tengan que exhibir por su actitud retrógrada y pueril, de no querer desprenderse de las prerrogativas millonarias que le tocan a ese partido en Chiapas. Así que sus días están contados
Por hoy es todo, nos leemos en el próximo En Resumen…
