El empresario se enfrenta ante una posible resolución judicial que podría obligarlo a pagar más de 35 mil millones de pesos en impuestos, deuda que ha litigado desde 2008; ministros de la Suprema Corte han propuesto negar amparos
Aquínoticias Staff
El magnate Ricardo Salinas Pliego, presidente de Grupo Salinas, se encuentra ante una posible resolución judicial que podría obligarlo a pagar más de 35 mil millones de pesos en impuestos, deuda que ha litigado desde 2008. Los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Yazmín Esquivel Mossa y Alberto Pérez Dayán, han propuesto negar los amparos solicitados por Salinas Pliego, lo que significaría el pago inmediato de esta suma.
Los proyectos de los ministros Esquivel y Pérez Dayán se discutirán en la Segunda Sala de la SCJN el próximo 9 de octubre. Aunque el empresario ha intentado retrasar el fallo, su defensa ha presentado argumentos para que las ministras Esquivel y Lenia Batres Guadarrama se excusen de la votación, alegando afinidades con el expresidente Andrés Manuel López Obrador y el gobierno federal.
Uno de los créditos fiscales más significativos corresponde a un adeudo de 18 mil millones de pesos originado en 2013. A este se suman otros impuestos pendientes desde 2008, por un monto de mil 431 millones de pesos. Ambas cifras, actualizadas con multas y recargos, alcanzan los 35 mil millones de pesos.
Desde 2008, Salinas Pliego ha litigado múltiples créditos fiscales y ha logrado extender los plazos para el pago de estos adeudos. Sin embargo, tribunales como el Tribunal Federal de Justicia Administrativa han fallado a favor del Sistema de Administración Tributaria (SAT), que exige el pago de estas deudas.
El caso ha ganado notoriedad porque, según un reportaje de marzo publicado por SinEmbargo, la deuda total de Salinas Pliego con el fisco asciende a 63 mil millones de pesos. Si la SCJN falla en contra del empresario en estos dos expedientes, aún quedarán pendientes 28 mil millones de pesos por otros créditos fiscales.
López Obrador, en su momento, reconoció haber ofrecido un descuento de ocho mil millones de pesos a Salinas Pliego para resolver parte de la deuda, pero el empresario rechazó la oferta. Ante la presión pública, el presidente comentó que quedó «aliviado» de que Salinas Pliego no aceptara, evitando suspicacias sobre un trato preferencial hacia su «amigo».
Mientras tanto, Salinas Pliego ha endurecido su postura pública, criticando al gobierno y calificándolo de «gobernícola». A medida que se acerca la resolución final, el empresario ha utilizado tácticas legales para cuestionar la imparcialidad de los ministros involucrados.