Expertos alertan sobre la urgencia de acciones ante los desafíos hídricos en Chiapas, Tabasco y Veracruz, donde la contaminación, la sobreexplotación y el cambio climático amenazan la sustentabilidad del agua y el desarrollo regional
Noé Juan Farrera Garzón / Aquínoticias
El estudio Retos y Oportunidades para la Seguridad Hídrica en el Sureste de México fue presentado en Veracruz, revelando una situación alarmante en los estados de Chiapas, Tabasco y Veracruz. A pesar de ser una de las regiones con mayor disponibilidad de agua en el país, la combinación de factores naturales y humanos ha generado un escenario crítico que compromete la sustentabilidad del recurso hídrico.
Elaborado por expertos como Felipe Arreguín Cortés, Raúl Rodríguez Márquez, Jorge Arriaga Medina y Jorge Fuentes Martínez, el documento destaca que el cambio climático, la sobreexplotación de acuíferos, la contaminación y la falta de infraestructura adecuada son los principales desafíos. Instituciones como el Consejo Consultivo del Agua, la Red del Agua UNAM y el Centro Regional de Seguridad Hídrica bajo los auspicios de la UNESCO respaldan este análisis, que busca concientizar a gobiernos y población sobre la urgencia de actuar.
Desde una perspectiva social, el estudio revela una marcada desigualdad en el acceso al agua potable y saneamiento. Mientras ciudades como Villahermosa y Veracruz enfrentan problemas de sobreexplotación, comunidades rurales carecen de infraestructura básica, lo que afecta su calidad de vida y desarrollo económico. En el ámbito turístico, la contaminación de ríos y humedales pone en riesgo la sostenibilidad de una industria clave para la región, conocida por su biodiversidad y atractivos naturales.
Durante la presentación, los especialistas hicieron un llamado a las autoridades estatales y federales para implementar políticas basadas en evidencia científica. En particular, instaron al gobierno de Chiapas, encabezado por Eduardo Ramírez Aguilar, a priorizar acciones que garanticen la seguridad hídrica y el manejo sostenible de las cuencas hidrológicas.
El estudio propone un enfoque integral basado en cuatro pilares: acceso universal al agua potable, protección de ecosistemas, abastecimiento para actividades productivas y resiliencia ante el cambio climático. La gestión del agua en el sureste no solo es un reto ambiental, sino también social y económico que demanda soluciones urgentes y coordinadas.
Con información de Primer Plano Magazine