Sigo al frente del gobierno, no estoy invalido por cirugia: EPN

A las 7:30 horas el presidente Enrique Peña Nieto fue sometido a una intervención quirúrgica de emergencia, en el Hospital Central Militar, para extirparle la vesícula biliar

Redacción

[dropcap]T[/dropcap]ras presentar un intenso malestar físico durante la madrugada de este jueves, A las 7:30 horas el presidente Enrique Peña Nieto fue sometido a una intervención quirúrgica de emergencia, en el Hospital Central Militar, para extirparle la vesícula biliar.
Horas después, el mandatario dejó claro que durante su convalecencia se mantendrá al frente de sus funciones como titular del Poder Ejecutivo federal y que estará listo para recibir el próximo lunes a los reyes de España, al arrancar una visita de Estado a México; «me siento muy bien», estableció.
El director del Hospital Central Militar, general de brigada Médico Cirujano Fernando Arcaute Velázquez, dijo que en ningún momento estuvo en peligro la vida del Presidente.
Eduardo Sánchez, vocero del gobierno de la República, dijo: «El Presidente, como lo decían los médicos que lo atendieron, está consciente, está en un periodo de convalecencia, sin embargo está al frente de su responsabilidad y no está bajo ninguna circunstancia impedido para poderlo hacer».
Esta es la segunda ocasión en que es intervenido quirúrgicamente Peña Nieto desde que asumió la Presidencia de la República. El 31 de julio de 2013, también en el Hospital Central Militar, se le extirpó la glándula tiroides.
Así pues, desde el pasado miércoles Peña Nieto comenzó a sentir molestias que nunca relacionó con la vesícula. Comentó que la madrugada del jueves sintió dolor pero que al final desarrolló un día normal de actividades y que incluso por la noche dio varias audiencias.
«Y fue ya, prácticamente, ya muy noche y en la madrugada, que verdaderamente tuve un dolor muy agudo, lo cual no quise esperar y me vine rápido al Hospital Militar para que me revisaran, y la recomendación médica fue que en algún momento había que hacer la cirugía, que era un buen momento.
«Y dije: de una vez. Porque si nos esperamos y programamos; dije: de una vez. Vámonos. Y así fue la decisión tomada, y la verdad es que fue una operación muy rápida. Entiendo que se practica en menos de una hora», señaló el jefe del Ejecutivo en una entrevista de radio con Joaquín López Dóriga.
El jueves por la tarde se había cancelado la Carrera de Molino del Rey, que organiza cada año el Estado Mayor Presidencial.
Minutos después, el mismo jueves, se canceló su participación en la inauguración de las exposiciones de Miguel Ángel y Da Vinci en Bellas Artes, que se realizó por la noche y este viernes por la mañana se canceló su participación en la Cumbre del Mecanismo de Tuxtla que se desarrolló Guatemala.
Sin embargo, desde su convalecencia, Peña habló por teléfono con el presidente Otto Pérez, de Guatemala, sobre la importancia del Mecanismo.
Peña esgrimió que la cancelación de la carrera se debió a un problema logístico, sobre lo de Bellas Artes comentó que no asistió porque se prolongó su agenda y decidió atender los pendientes y audiencias que tenía.
«La verdad muy bien. Me siento físicamente muy bien y anímicamente mejor todavía. Y más que puesto para regresar a mi actividad ordinaria, sin dejar de darle seguimiento puntual a todo lo que está ocurriendo. Tengo aquí la conectividad, a través de la red gubernamental, lo que me está permitiendo tener comunicación con varios de los colaboradores y funcionarios para atender distintos temas», dijo.
Al ser cuestionado sobre quién esta al frente del gobierno federal en este momento de convalecencia, respondió: «No, pues el Presidente. Yo no estoy ni inválido, ni discapacitado. No tengo ninguna discapacidad. Estoy al frente de esta actividad.
«Estoy en un proceso de convalecencia normal, regular, de una operación que entiendo, te repito, es algo frecuente. Pero estoy muy al tanto, siguiendo lo que está ocurriendo en México y en otras partes».
El constitucionalista Miguel Carbonell dijo que la única referencia legal que existe en torno a lo que debe pasar cuando se ausente el Presidente de la República es el artículo 84 de la Constitución, el cual establece la figura y el orden de la suplencia. «No veo yo que se requiera la suplencia», agregó.
Peña Nieto agradeció a través de Twitter al personal del hospital por sus atenciones, deseó éxito al presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, por la Cumbre del Mecanismo de Tuxtla, y condenó los atentados en Túnez, Kuwait y Francia.

Entre el poder y la enfermedad

Enfermedades crónicas, accidentes, intervenciones quirúrgicas de los presidentes de México, a lo largo del siglo 20, quedaron en el rumor y allí se volvieron anécdotas inconsistentes, al surgir versiones distintas, que se quedaban en segundo plano, ante el halo del presidencialismo del todo poderoso, perfecto, sano, fuerte, ajeno a los males de salud y a la muerte misma.
El 5 de julio de 1997, el presidente Ernesto Zedillo rasgó las cortinas del secreto en torno de la salud del jefe del Ejecutivo federal y, en Los Pinos, en ropa deportiva y tenis se presentó ante la Prensa, con la novedad de que le habían practicado una microcirugía en la rodilla derecha.
Llegó en silla de ruedas a la sala de la residencia Miguel Alemán, apoyado por su hijo Carlos de 15 años, entonces, y luego, con muletas se valió por sí mismo, y contó todos los detalles del mal que lo llevó a la plancha: los meniscos gastados y un fuerte golpe que se dio al jugar con el tenista del momento, Oliver Fernández.
Tiempo después, el primer presidente panista, Vicente Fox Quesada, llevó hasta la cama de hospital a fotógrafos y camarógrafos, que dieron sus testimonios de una intervención quirúrgica, para corregir una hernia discal, el 12 de marzo de 2003, cuando el mundo vivía la crisis que llevó a Estados Unidos a declarar la guerra Irak sin el voto de apoyo de México en el Consejo de Seguridad. Y habría sido la primera vez que un presidente mexicano no estaba para tomar la llamada de un presidente estadounidense.
Su sucesor, Felipe Calderón sufrió un accidente en bicicleta, en los jardines de Los Pinos el 30 de agosto de 2008, de lo cual se informó al día siguiente, para explicar el uso de cabestrillo, porque tuvo «fractura del húmero (hombro) izquierdo», y una contusión en la rodilla izquierda.
En el extremo hermético, se refiere el caso del presidente Adolfo Ruiz Cortines, quien fue operado del apéndice al inicio de su mandato, y aunque lo atendió el doctor Gustavo Baz, se negó a que le aplicara anestesia general. Había que estar a cargo de los hilos del poder.
Adolfo López Mateos, aquejado por dolores de aneurismas, ya como ex presidente murió a consecuencia de estos males.
Gustavo Díaz Ordaz, quien sufrió desprendimiento de retina del ojo derecho hacia el final de su mandato, y apareció en fotos con un parche posoperatorio, mantuvo reservada la historia del padecimiento, de lo cual se derivaron versiones distintas sobre la causa, que quedó en el mito y en la burla: «En la tierra de los ciegos, el tuerto es rey».
De Luis Echeverría, los enterados decían que padecía de los riñones, pero la imagen era de un hombre sano, robusto e incansable, y de igual manera se comportaba su sucesor José López Portillo. La discreción médica es la caja fuerte de los expedientes médicos de Miguel de la Madrid y Carlos Salinas de Gortari. La historia deja lagunas en los casos de Plutarco Elías Calles, Lázaro Cárdenas, Manuel Ávila Camacho y Miguel Alemán.
El politólogo José Fernández Santillán, académico del Tecnológico de Monterrey, campus ciudad de México, subrayó que aunque el presidencialismo en México, paso de un régimen hegemónico, a ser un elemento de un sistema plural y competitivo, los mexicanos «tenemos mentalidad presidencialista».
Alertó que desde la tarde de este jueves 25 de junio, en que hubo cambios en la agenda presidencial y hasta que se dio a conocer en la mañana del viernes que Peña Nieto había salido del quirófano, el país desconoció todo.
En la casa presidencial no se priorizó la salud de presidente, y se antepuso la agenda, consideró. «Aún en el régimen presidencialista mexicano, en cuestiones de salud del Presidente, como con todo paciente, el médico manda», apuntó.

Políticos pisan el quirófano

– Andrés Manuel López Obrador, 3 de diciembre de 2013. El líder moral de Morena sufrió un infarto agudo al miocardio, por lo que le practicaron un cateterismo cardiaco.
– Miguel Ángel Mancera, 30 de octubre de 2014. El jefe de Gobierno del DF fue intervenido quirúrgicamente por una arritmia cardiaca. Durante el proceso de ablación se presentó una perforación cardiaca, lo cual ocasionó una intervención de emergencia.
– Margarita Zavala, 13 de junio de 2012. La panista y esposa del ex presidente Felipe Calderón fue sometida a una operación en el ojo derecho, debido a un desgarre de retina. El 2 de julio de 2012 fue intervenida nuevamente debido al desprendimiento de retina en el ojo.
(Con información de El Universal)

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