Desde hace seis años la comunicadora de profesión tiene otro oficio, adorna árboles de navidad
Sandra de los Santos / Aquínoticias
Adornar los árboles de navidad de su familia y de su propia casa le era insuficiente así que empezó a decorar los de sus amigas y el de otras personas que le llaman para solicitarle sus servicios.
Tamara Longines Abadía es comunicóloga de profesión y ha laborado en diferentes medios, pero desde hace seis años durante estos meses del año tiene otro oficio, el de decoradora de árboles de navidad.
Desde niña tenía una fascinación por los últimos meses del año, y su familia tenía el hábito de adornar su casa para estas fechas, tenían hasta un día especial para hacerlo, el 20 de noviembre.
«Después del desfile acostumbrábamos irnos a la casa y poner el árbol de navidad, yo también lo hacía así, ahora con mi hijo y mi esposo, pero ahora ya son tantas las ganas que lo hacemos el 03 de noviembre. Literal quitando el altar de muertos ponemos el árbol» cuenta Tamara.
Desde meses antes, se empieza a preparar con los arreglos navideños, algunos los hace ella misma y otros los compra en diferentes lugares. Ya tiene bien visto dónde y cuándo encontrar ofertas, en qué tiendas se encuentran productos de mejor calidad o a menor precio.
«A mi familia, a mis amigas o a las personas que me hablan para que las ayude también las apoyo para que hagan sus compras porque yo no doy los materiales. Adornamos el árbol con lo que cada quien tenga».
El precio para decorar un árbol puede variar mucho dependiendo el tamaño del árbol, el concepto y los materiales; pero Tamara asegura que se puede tener un muy buen resultado a bajo costo ya sea reciclando o buscando los precios más bajos.
«Se puede adornar una rama seca, se pueden aprovechar los árboles que de por sí se tienen en casa o hacer uno con algún otro material» dice.
Tamara es todo lo contrario de «El Grinch», ese personaje que odia la Navidad. A ella le encanta y por eso encuentra una gran fascinación por crear un ambiente especial para recibirla, sobre todo en estos tiempos pandémicos.
«Creo que venimos de dos años muy difíciles ya sea por una u otra cosa ha habido problemas generados por la pandemia, entonces, el poder tener un espacio que tenga armonía, que sea adornado, algo que nos llame a la vida es importante y vale la pena emplear nuestro tiempo en ello» considera la decoradora.
Cuenta que muchos de los árboles que ayuda a poner es más por el gusto de convivir con sus familiares y amigas, que le gusta ser parte de la convivencia que se logra en torno a poner un árbol de navidad. Así comenzó todo, ayudando a sus afectos a adornar sus hogares, pero después fueron más las personas que le fueron pidiendo hacer el trabajo.
Tamara cree que todas las familias deberían de tener un lugar seguro, un espacio de convivencia para pasar estas fechas, un recinto que procure la felicidad, y a ella le alegra su corazón el ser parte de crear ese ambiente.
