Cuatro ejemplares de manatí, rescatados durante contingencia ambiental que causó la muerte masiva de estos mamíferos sirénidos, fueron liberados para repoblar su hábitat natural en Catazajá
Aquínoticias Staff
En una acción conjunta sin precedentes, el Aluxes Ecoparque Palenque, junto con otras instituciones de la Asociación de Zoológicos Criaderos y Acuarios de México (AZCARM) y comunidades del municipio de Catazajá, lograron la liberación de cuatro manatíes en su hábitat natural. Estos animales fueron rescatados durante una contingencia ambiental que causó la muerte masiva de manatíes en la Reserva de la Biósfera de Pantanos de Centla, una región que abarca parte de Tabasco y Chiapas.
El regreso a la libertad
La directora de Aluxes Palenque, Josefa González Blanco Ortiz Mena, destacó la importancia de este evento, que marca el inicio de una nueva vida para estos mamíferos marinos en la Laguna de Catazajá. «Hoy es el gran día que tienen que regresar a la laguna, para reproducirse, para repoblar, para vivir en libertad», comentó emocionada. Este retorno no solo les ofrece una oportunidad de reintegrarse en la naturaleza, sino que también libera espacio para futuros rescates en las instalaciones de semilibertad del parque.
Un esfuerzo coordinado
Desde el 2018, la AZCARM y sus especialistas han estado trabajando incansablemente para salvar a estos animales, también conocidos como vacas marinas. Ernesto Zazueta, presidente de la AZCARM, recordó el origen de este proyecto, que surgió tras una crisis ambiental que diezmó a la población de manatíes. «Estuvimos trabajando para realizar un sueño que comenzó con una pesadilla en 2018», dijo, recordando cómo muchos manatíes quedaron huérfanos y fueron criados en Aluxes Palenque.
La logística para la liberación fue compleja y requirió una coordinación meticulosa. Los manatíes, algunos de los cuales pesan más de 800 kg, fueron trasladados con el apoyo de las comunidades locales, especialistas de diversas instituciones y empresas como Holcim y FYMSA, que proporcionaron equipos esenciales para el transporte y manejo de estos delicados animales. Además, el Zoológico Guadalajara donó equipos de telemetría, fundamentales para el monitoreo de los manatíes tras su liberación.
Los desafíos de la conservación
La liberación de estos cuatro manatíes en Catazajá es un hito significativo en los esfuerzos de conservación, especialmente considerando la grave amenaza que enfrentan debido a factores como la contaminación del agua y la proliferación de algas tóxicas, causadas por actividades agrícolas, ganaderas e industriales. Estas condiciones llevaron a una mortandad inusual de más de 150 manatíes en 2018, lo que impulsó una respuesta urgente de las autoridades y especialistas para frenar esta crisis.
El Dr. Roberto Sánchez Okrucky, especialista en mamíferos marinos de la AZCARM, junto con el MVZ Edmundo Parada y el experto en fauna silvestre @Damianimals, jugaron un papel crucial en la supervisión del bienestar de los animales durante el proceso. «Colocamos un cinturón con un transmisor GPS en cada manatí para monitorear sus movimientos y adaptar nuestras estrategias de conservación», explicó el Biólogo Ricardo Dávalos Sáenz del Zoológico Guadalajara.
Un futuro prometedor
Horas después de la liberación, los datos de telemetría mostraron que los cuatro manatíes se habían reunido y estaban explorando juntos su nuevo entorno. Este éxito no solo representa una victoria para la conservación de una especie en peligro de extinción, sino que también subraya la importancia de la colaboración entre instituciones y comunidades locales.
Zazueta concluyó con un mensaje de esperanza y compromiso: «Las instituciones de la AZCARM vamos a seguir trabajando para realizar más liberaciones en medio silvestre y lograr salvar a más especies de la extinción». Esta liberación es solo un paso en un camino más largo hacia la preservación de nuestro medio ambiente y las especies que lo habitan.
