Expertos hablan de las ventajas y desventajas de beber un vaso de leche caliente cuando se intenta dormir
Lucero Natarén / Aquínoticias
Desde hace muchos años se ha extendido el dicho «tu lechita y a dormir», haciendo referencia a la ingesta de leche tibia para poder conciliar el sueño, práctica que parecía eficaz cuando eras niño, pero, ¿qué tan eficaz es para dormir en la adultez?
La respuesta es multifacética. Uno de los factores por lo que esta práctica es cierta es que, de acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina, la leche contiene triptófano, un aminoácido esencial, el cual al ser ingerido ayuda a crear serotonina, la cual a su vez se transforma en la hormona melatonina, misma que ayuda a dormir.
Sin embargo y pese a lo anterior, el ingerir leche por la noche puede tener sus desventajas. Por ejemplo, la lactosa, la cual según el medio Live Science, se encuentra de forma natural en la leche y es conocida por causar complicaciones para dormir a quienes tienen estómagos sensibles o intolerancias a los productos lácteos.
Volviendo a los factores positivos de beber leche, de acuerdo con el psicólogo clínico Michael Breus, es que te hace recordar tu infancia y cómo quien te cuidaba te lo brindaba.
Con respecto a la temperatura, no existen estudios que lo avalen que la leche deba estar a cierta temperatura para ser eficaz para producir sueño. Entonces, de acuerdo con los expertos, si tu cuerpo no es intolerante a la lactosa, tomar «lechita» siempre será bueno para ir a dormir.