Aun la frecuencia de su consumo y hasta ya considerada droga menor, con el hecho de que se haya destruido un plantío en la entidad, que deja en claro que una cosa será consumirla y otra el delito de sembrarla, el asunto es polémico: la legalización de la mariguana.
Para enero serán los foros de referencia por toda la República, de acuerdo al anuncio del Senado y la final habrá de efectuarse en su sede, aunque creó un Consejo Técnico, que bien puede cambiar todo y ser el anfitrión y centralizar los foros a la ciudad de México, y discutir allá las iniciativas relativas a la regulación de la mariguana, aun sea un asunto de interés nacional.
El presidente de la mesa directiva del Senado, Roberto Gil Zuarth, anunció que se determinará si el consumo de la mariguana continúa siendo una medida estatal idónea, proporcional y necesaria, luego de conocerse la sentencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y «desde la perspectiva de la eficacia y progresividad de los derechos fundamentales», esto es si se abre la posibilidad de regular el consumo medicinal y para «ponerse».
Según el senado ese Consejo Técnico se encargará de organizar el calendario de actividades y estará conformado por integrantes de las comisiones de Justicia, Salud, Gobernación, Derechos Humanos y Estudios Legislativos.
Pero tenemos un problema: el que los legisladores sean parte de esas comisiones no los hace expertos en nada relacionado con esa droga ¿o sí?
Obvio se tendrán que cambiar algunas leyes secundarias, como la General de Salud, Contra la Delincuencia Organizada y el Código Penal Federal, y ya ni se digan las de referencia en el ámbito estatal.
Si no es nada más «lo hacemos».
Se dice que en los debates podrán participar aquellas personas que deseen exponer sus puntos de vista –eso dicen-, pues habrá representantes de la Academia Mexicana de Ciencias, la COFEPRIS, la ANUIES, el Instituto Nacional de Ciencias Penales, Servicio Nacional de Sanidad, del Instituto Nacional de Salud Pública, de la UNAM, la Organización nacional de la ONU contra las Drogas y el Delito, PGR, INEGI, CIDE, Colegio de México, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, el Consejo Nacional de Seguridad Pública y los que se acumulen de aquí a diciembre.
De siempre dicen que el tema será abierto a la sociedad civil, instituciones académicas, gubernamentales y de organismo internacionales, pero esas cosas ya las hemos oído antes; si hay la instrucción, habrá concenso.
