Contrario a lo que esperaban los seguidores del PAN, la planilla de Fernando Castellanos Cal y Mayor ganó la elección por Tuxtla Gutiérrez, esto de acuerdo al conteo de referencia en el Instituto Estatal y de Participación Ciudadana, que le otorgó ya su constancia de mayoría.
Desde luego que la planilla panista tiene opciones legales para impugnar éste proceso electoral, siempre y cuando pase todo el proceso que comprende, desde el tribunal local, la famosa sala de Xalapa, y desde luego la tercera instancia en el rubro, que es el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Todo lo demás, hasta los exabruptos en las redes, la verdad ya no importan. Es decir que en caso de impuganación -que la habrá- el asunto queda ya fuera del dominio de los ciudadanos.
Se judicializa el proceso; los ciudadanos se merecen ya, respeto entre sí.
Al Son que me toquen…
En medio del escándalo millonario de los gastos que generó que la sección 22 de Oaxaca administrara el IEEDO en esa entidad, aparece que esos excesos no se registraron en la entidad, y ni ésta es de las más afectadas por los paros magisteriales.
Ciertamente en Chiapas nació la CNTE en 1972, pero sus células más radicales se formaron en otras entidades verdaderamente señaladas como extremas y hasta vandálicas como el CETEG de Guerrero, o la 32 de Michoacán.
De todos modos, en nuestra entidad el magisterio sí ha realizado paros que han impactado en la calidad educativa, y desde luego hemos observado células radicales que si bien no han sido desmentidas por la sección siete, tampoco han sido avaladas como método de lucha, ni por las delegaciones de la misma.
Ciertamente ha sido pregunta constante de los propios agremiados qué se hace con las aportaciones sindicales, y ni los propios agremiados tienen esa respuesta con exactitud porque aun las cuentas claras de ese seccional, la verdad es que las movilizaciones no son gratuitas y cualquier político sabe cuánto cuesta hacer o realizar una movilización al estilo de la CNTE en Chiapas, en la que participan una veintena de miles de mentores.
En el caso chiapaneco la política de puertas abiertas, de mesa de negociación, ha sido una constante, y desde luego hay una disposición del mandatario, pero éste cuenta con un secretario del sector que ha demostrado por años, su capacidad y desde luego, su conocimiento sobre el argot magisterial y sus diversas necesidades y corrientes internas pues fue maestro de aula.
Ricardo Aguilar Gordillo es de los pocos que han permanecido por su eficiencia, responsabilidad pero sobre todo resultados.
En Chiapas si bien se han perdido clases no se ha afectado el ciclo escolar como en Oaxaca, Michoacán, Guerrero. Hay un trabajo de acercamiento y negociación constante: en la secretaría a su cargo hay puertas abiertas y no creo que exista al momento queja de solicitudes rechazadas, audiencias no concedidas.
Claro que hay los que quieren las perlas de la virgen; no hay privilegios, menos ante acusaciones desfiguradas, abusivas, para un funcionario sostenido a base de su trabajo.
Ahí está el hecho de que se mantiene.
