Pese a que la Profeco informó que constataría que no hubiese incrementos injustificados o abusos en contra de los consumidores que se vieron afectados por el sismo del 7 de septiembre en el estado, analistas de la Escuela Bancaria y Comercial (EBC) Campus Chiapas exponen que la canasta básica alimentaria en el estado registró un aumento de 9.5 por ciento en comparación con enero de este mismo año
Elizabeth Marina / Portavoz
[dropcap]D[/dropcap]urante el mes de septiembre los precios de los productos y servicios que las autoridades hacendarias prometieron estabilizar entre los meses de mayo y junio aumentaron significativamente en algunos estados, entre ellos, los que se vieron afectados por los sismos del 7 y 19 de septiembre.
Pese a que la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) informó que constataría que no hubiera incrementos injustificados o abusos en contra de los consumidores por los fenómenos naturales ocurridos, analistas de la Escuela Bancaria y Comercial (EBC) Campus Chiapas exponen que la canasta básica alimentaria en el estado registró un aumento de 9.5 por ciento en comparación con enero de este año.
Luego del golpe a la economía familiar por el incremento en el costo de la gasolina a principios de 2017, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reveló que la inflación ascendió y advirtió que lejos de ver un decremento en los precios se corría el riesgo que estos alcanzaran una tasa superior al siete por ciento en los próximos meses.
El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), del cual parten los precios de la llamada Canasta Básica, tuvo a nivel nacional un incremento del 6.31 por ciento en los nueve rubros que la integran, entre ellos: alimentos, educación, transporte y vivienda; del 2014 a la fecha, el INPC ha registrado un incremento en los precios de casi un 5.5 por ciento.
Evidentemente, la economía en el estado más pobre del país golpea directamente a miles de familias, quienes además de verse afectadas por los acontecimientos sismológicos ahora enfrentan adversidades como el encarecimiento de los productos básicos.
De acuerdo con el especialista en economía y docente de la EBC, Sergei Lizama Ruiz, se avecina una de las cuestas de enero más duras en la historia como resultado del desempleo, problemas inflacionarios, baja productividad, catástrofes naturales que, aunados a los niveles de pobreza extrema que presentan algunos de los municipios terminarán por afectar a casi todo el sector poblacional; por lo que el analista también augura un difícil cierre de año.
Productos como el arroz, frijol, cereales, papel higiénico, pañales, atún, galletas y agua embotellada sufrieron modificaciones en su precio, incluso cuando la Profeco aseguró que estos se mantendrían.
Derivado de las variaciones en el precio de la gasolina, el rubro más afectado ha sido el de los alimentos, principalmente la Canasta Básica que según Sergei Lizama Ruiz está clasificada en dos: la urbana y la rural.
En este sentido explicó que la canasta básica urbana alcanzó un precio de 2 mil 850 pesos en enero de 2017, esto por el reflejo de cinco productos principalmente: aguacate, limón, jitomate, carne de pollo y res; y al cierre de junio, su costo llegó hasta los 3 mil 200 pesos.
En el caso de la canasta rural que tenía un costo promedio de mil 890 pesos, con estos incrementos alcanzó hasta los 2 mil 200 pesos.
Es importante mencionar que el primer afectado por estos incrementos desmedidos es el bolsillo del consumidor, pues su nivel adquisitivo cayó en un 3.8 por ciento, según fuentes del Inegi.
Los analistas señalaron que el incremento en los precios puede aumentar hasta en un 15 por ciento por ciento para el cierre de este año, por lo que recomendaron ser cautelosos con las compras, consumir local para contribuir al mejoramiento de la economía chiapaneca considerando que los estragos ocasionados por la inflación son claramente visibles y para muchas familias es casi imposible que su promedio salarial se vea reflejado favorablemente en la adquisición de los productos básicos.
