Comentando la noticia / Alfonso Carbonell Chavez

¿Qué nos pasa?

Si mucho me apuran ¡ésa sería la pregunta pertinente que deberíamos estarnos haciendo los chiapanecos todos! Porque ¡ya basta! de murmuraciones a hurtadillas sobre lo que a Chiapas, en lo que va de esta administración gubernamental, pasa; cuándo, así parece, a todos nos pasan la rata por nuestras propias narices y todos contentos. Sin duda confrontarse con el poder establecido siempre ha representado un riesgo inminente y he ahí el por qué, los panteones estén llenos de héroes. Pero no es necesaria la confrontación con el poder cuándo a la población le asiste el reclamo legítimo de tener gobiernos que actúen con transparencia y la exigencia social demanda rendición de cuentas; el gobierno es decir quienes nos gobiernan, no tienen por qué sentirse incómodos ni molestos si para ello los elegimos; para que cumplan con su mandato constitucional y nos rindan cuentas. Es así que en estos ya tres años del gobierno de Manuel Velasco Coello y contando, el malestar entre la ciudadanía es manifiesto y no se reduce, ahora no, solo al reclamo airado y siempre fuerte del sector magisterial que pese a sus estrategias, opinión personal, fueras de foco ya que solo hablan a título personal o si usted quiere de grupo alcanzan sus propósitos primeros ($), ahora lo mismo son los empresarios y comerciantes proveedores del gobierno o bien también los editores de medios modestos pero sin duda válidos, quienes han tomado las plazas públicas para demandar sus pagos y al mismo tiempo denunciar actos de represión y corrupción. Pero no son solo éstos sino que el malestar, por decir lo menos, de la sociedad, ya cala en las mesas de cientos de miles de familias chiapanecas que cotidianamente se debaten en el dilema Shakesperiano de «comer o no comer» he ahí la pedo. Como «decimo» acá en Chamula.
La pregunta antes y siempre válida sobre ¿qué nos pasa?, hoy adquiere relieves y connotaciones antes inimaginables, porque si bien hemos tenido gobiernos desordenados, promiscuos y rapaces ¡Uta!, el grado de descomposición y de insultante depredación que ha mostrado el actual, rompe cualquier proporción en su desmedida ambición de dinero y poder. Y miren señores funcionarios y principal responsable joven Velasco; ¿usted cree que quienes lo criticamos somos sus enemigos, sus detractores, sus verdugos… sin hacha ni cadalso? La verdad ¡no! Lo que sí, es menester, que usted y quienes lo acompañan en su gobierno (recuerde solo usted fue electo los demás son de su estricta competencia y responsabilidad) a estas alturas del gobierno, diga si no, nos salen debiendo. Ya lo anotaba en columna anterior de, pongamos; no se han «carranceado» nada; entonces la situación ya de por sí difícil de entender, es más grave aún porque ese dinero que ha llegado a la entidad vía recursos federales, alguien los debe de estar sustrayendo porque, otra verdad de Perogrullo, pues no se ven por ninguna parte. Sí se entiende, se gasta en la burocracia principalmente en sus altos salarios que dicho al margen, ofenden a una población sumida en la miseria, y claro una obra por aquí otra por allá y párele de contar. Pero prosigamos el entuerto; por qué la Auditoría Superior de la Federación (ASF) nos sale con la revelación de que una cifra superior a los 4 mil millones de pesos del ejercicio 2014 no tiene sustento. Es decir, lo informado con lo auditado no corresponden en obras y programas por ese orden. O mejor dicho aparente desorden. ¡Qué alguien me explique!
Pero ¿qué nos pasa?, insisto la pregunta, porque incluso en las propias secretarias de estado se quejan que desde las oficinas de Hacienda estatal no les dan ni para papel de baño y ahora las secretarias que no secretarías de los funcionarios, escriben sus recados con bicolores ¡qué ya un lapicero bic! Insisto alguien y algunos se están robando la paga. Me queda claro. La economía de la entidad está devastada; los comercios y proveedores mueren de inanición habida cuenta, que el principal consumidor y demandante de insumos es el gobierno. Es triste por no usar otro adjetivo que exprese mejor la situación imperante, cómo un día y otro y otros más decenas de negociaciones antes boyantes, han bajado sus cortinas con el anuncio de «se renta», porque ya no hay economía y por lo mismo circulante. No estoy llamando a la rebelión (de los colgados) ni mucho menos, pero es tiempo de que como sociedad asumamos un papel protagónico ante esta debacle no solo económica sino que ha trastocado los más elementales preceptos de la honorabilidad, y ahora no hablo del gobierno, sino de los gobernados. Como que nos resignamos a nuestra suerte y el destino manifiesto de nuestra propia mordaza existencial. Aceptamos todo y nos rendimos a la voz engañosa del amo. No bastaron 300 años de conquista ni más de doscientos de luchas fratricidas en nuestro país; ahora solo nos encomendamos a la virgen morena o a nuestros propios demonios y esperamos la resurrección de los muertos. Amén. Una vez más y va para la sociedad en general; ¿Qué nos pasa?

Ya de salida

Y como si fuera cuestión de enfoques; uno puede ver el vaso medio lleno o medio vacío, y la verdad que prefiero verlo medio lleno porque «no todo está podrido en Dinamarca»… por fortuna. Por lo que es menester considerar que en el tema que ya hace un par de meses atrás se planteó sobre la reforma constitucional en Chiapas, pues ahí va pian pinito como se suele decir, y quien encabeza esta titánica encomienda no es otro que el diputado presidente del Congreso local, Eduardo Ramírez Aguilar. En cierta ocasión que tuve oportunidad de entrevistarlo en la sede del congreso, previó al anuncio oficial de esta empresa legislativa, me comentaba que era necesario convocar a la sociedad en general para que en una gran cruzada las voces de todos, se escucharan sobre de sus más ingentes demandas, sus preocupaciones incluso sus más caros anhelos y luego entonces fueran transmutadas en leyes que así, respondieran a las legítimas aspiraciones de seguridad, desarrollo y paz. No fue exactamente así como me lo refirió pero creo interpreté en lo sustancial su propuesta y objetivos de tan descomunal iniciativa reformadora. Y es que ¡está hablando de la ley fundamental que rige la vida y las relaciones de la sociedad apegados a los más altos y claros preceptos de convivencia en orden con paz! ¡Nadita! Sé que ya van varios foros con temáticas diversas que se han realizado y sin duda, como el más reciente realizado en Villaflores, más voces, pensamientos acallados e ideas innovadoras estarán alzándose y presentándose en estas jornadas legislativas. Porque finalmente eso son. Veremos o más bien buscaremos al diputado ERA, si su agenda se lo permite, tener una nueva charla e incluso, invitación pública, pueda llegar al programa «Me queda claro» que conduzco en la Nueva FM 94.7…// Esperaré paciente. Y hasta aquí por hoy…// ¡Me queda claro! Salu2.

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