¡Cuidado! Podria estar consumiendo salchichas que no lo son: Profeco

11 productos de diversas marcas de jamón de pavo y cerdo no venden al consumidor lo que indican, algunos ofrecen menor cantidad y otros simplemente no son salchichas

Ana Liz Leyte / Aquínoticias

Estudios recientes de la Procuraduría Federal del Consumidor (Porfeco), revelaron que algunos de los embutidos populares en México no son lo que muestran en sus etiquetas y empaques.

En el estudio de la Profeco, publicado en la Revista del Consumidor se encargaron de analizar 57 marcas de salchichas para determinar características de los productos y además desmentir o verificar información que las marcas proporcionan a los usuarios en sus empaques.

En dicho estudio se determinó que 11 productos de diversas marcas de jamón de pavo y cerdo no venden al consumidor lo que indican, algunos ofrecen menor cantidad y otros simplemente no son salchichas.

Entre las principales conclusiones del estudio, se indicó que las marcas Bafar, jamón de pavo 400 gramos, y Duby, jamón cocido de pavo 500 gramos, tienen 4.7 por ciento y 4.6 por ciento menos producto, respectivamente, por lo que ambas marcas no cumplen con el contenido que anuncian.

Asimismo, manifiesta que la marca Galy, jamón cocido de cerdo y pavo a granel, a su vez, incumple el porcentaje mínimo de cerdo que debe tener, ya que contiene 51.5 por ciento y debe tener mínimo de 55 por ciento; mientras que la marca Parma, jamón de pierna york 200 gramos, no indica en etiqueta la clasificación comercial.

De acuerdo a su formulación, la Profeco indica que la marca Sparta Cocido, jamón de pavo y cerdo de 1 kilogramo, no debería usar la denominación jamón puesto que contiene pollo que no declara en ingredientes.

Además, subraya que la marca Duby 500 gramos se denomina «jamón cocido de pavo» pero la totalidad de la carne utilizada no corresponde a muslo de pavo, como lo exige la Norma Oficial Mexicana-158-SCFI-2003 Jamón-Denominación y clasificación comercial, especificaciones fisicoquímicas, microbiológicas, organolépticas, información comercial y métodos de prueba.

En ese mismo sentido, refiere que la marca Lala Plenía, jamón virginia de pavo 250 gramos, no indica en el etiquetado el porcentaje de proteína de soya adicionada. «El fabricante mostró el cambio de etiqueta para corregir la omisión del porcentaje de soya».

Los que están fuera de la norma, advierte a la población la Profeco que son las marcas: Parma Campestre, Jamón de pierna 250 gramos que se ostenta como «fino», pero contiene fécula que, de acuerdo a esa clasificación, no debe tener. «El fabricante mostró el cambio de etiqueta para que corresponda a la categoría «preferente».

Asimismo, manifiesta que la marca Cuadritos, jamón virginia de pavo/ A granel no cumple el porcentaje de proteína libre de grasa, de acuerdo a la clasificación «preferente» que ostenta, como también figura la marca Parma Sabori, jamón virginia de pavo 250 gramos, que no cumple con el 25 por ciento de reducción de sodio para ostentarse como «reducido en sodio».

De igual forma, advierte que la marca San Rafael, jamón real pierna 300 gramos contiene de almidón que no declara en la lista de sus ingredientes.

En este sentido, la procuraduría recomienda a los consumidores que en dichos productos puede haber algunos ingredientes que se consideren alérgenos para algunas personas como son el gluten, leche o soya, donde algunas marcas incorporan ingredientes no cárnicos cuyo objetivo es sustituir una parte de la carne con un aporte proteico y funcional (soya), mientras que hay otros ingredientes como los almidones o las féculas de papa, maíz o chícharo; así como la carragenina, que se utiliza para aumentar la capacidad de retención de agua.

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