Los efectos que un sismo pueden tener en las construcciones pueden ser fatales, por lo tanto es necesario descartar cualquier daño que pueda poner en riesgo la estructura y la vida de quienes la habitan
Elizabeth Marina / Portavoz
[dropcap]T[/dropcap]ras un evento telúrico de gran magnitud, como el ocurrido el pasado jueves 7 de septiembre, es normal la presencia de miles de réplicas, tal como ocurre en Chiapas y que de acuerdo con especialistas continuarán, incluso, hasta por meses; por lo tanto es recomendable hacer una inspección minuciosa de los hogares para descartar cualquier daño en la construcción que suponga un riesgo mayor ante un próximo movimiento telúrico.
Portavoz consultó al doctor en riesgos sísmicos egresado de la Universidad Autónoma de México (UNAM) y profesor investigador en la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach), Raúl González Herrera, para conocer cuáles son los pasos para identificar daños en un inmueble.
El especialista dijo que lo más importante es tener conciencia respecto a los daños que la construcción sufrió en algún evento previo, pues esto podría ser un indicador que dicho daño se volvió a presentar, agudizando aún más el efecto.
Posteriormente, hay que hacer una búsqueda detallada en cada lugar de la construcción para conocer si apareció alguna grieta o fisura, éstas deben verificarse en función de la importancia que tienen.
Explicó que en el caso de las fisuras se caracterizan por ser muy pequeñas, no sobrepasan los 5 milímetros, en tanto que las grietas son superiores a los 5 milímetros y por fuerza tienen que atravesar el muro de ambos lados.
De esta forma, agregó, los daños peligrosos son las grietas, ya que cortan al elemento afectado; a su vez las más críticas son las diagonales ya que pueden causar el colapso total o parcial del inmueble, mientras que las verticales y horizontales son más fáciles de reparar.
El especialista recomendó a las familias que habitan viviendas que presentan grietas diagonales en toda la construcción, a actuar de inmediato, pues se encuentran ante una situación crítica.
Explicó que generalmente los daños se registran en la planta baja; sin embargo, la inspección debe hacerse en toda la vivienda.
Daños estructurales críticos
Si la construcción tiene mucha vibración o en cada réplica se perciben ruidos, entonces son indicadores de que hay un daño mayor que, en determinado momento, podría derivar en un colapso parcial o total.
«Si sientes la casa demasiado flexible o que cuando pasa un sismo sigue vibrando o en su caso, ocurren crujidos, posiblemente estamos sobre grietas internas que no se alcancen a ver y que son peligrosas», dijo el experto.
Lo más recomendable, señaló, es hacer croquis con las zonas más dañadas de la casa y en caso de volver a presentarse un sismo de alta intensidad, la familia debe refugiarse en las zonas más seguras o menos agrietadas; los baños dijo, suelen ser espacios seguros por ser muy pequeños.
De identificar que efectivamente la construcción tiene una grieta de alto riesgo, es necesario que se haga un reporte a Protección Civil para que el inmueble sea visitado por un perito o bien, consultar especialistas de dictaminarían el riesgo.
Cabe mencionar que en protección Civil estatal, en los colegios de arquitectos o ingenieros, existen especialistas que, después de un desastre natural, brindan el servicio de inspección gratuito.
En caso de ser una vivienda que aún no se ha liquidado, es necesario avisar a la constructora para que sus peritos acudan a hacer la revisión y reparar el daño.
Viviendas vulnerables
Entre menos densidad de muros, la vivienda se vuelve más vulnerable. De acuerdo con el titular del Ejecutivo estatal fueron más de 40 mil viviendas las que resultaron afectadas por el sismo y, según explicó Raúl González, gran parte de los daños se deben a la mala calidad de los materiales con las que fueron construidas.
En este sentido, dio a conocer que los elementos que resisten los sismos son los muros o columnas y no los castillos del muro como la gran mayoría piensa; ya que estos solo son complementos que ayudan al muro a soportar el movimiento telúrico.
«Al tener materiales frágiles, tenemos viviendas frágiles que muy probablemente se derrumbarán en un sismo de alta magnitud».
Lo ideal es construir con blocks de 100 kilos por centímetro cuadrado; sin embargo, muchos de los blocks que son utilizados son hasta cuatro veces menos resistentes; por lo tanto, el evento ocurrido el 7 de septiembre es un llamado que nos indica que los materiales de construcción y nuestras prácticas tienen que cambiar para evitar ser sorprendidos.
«Se piensa que los maestros de obra son personas capacitadas para construir casas pero este sismo es una claro ejemplo de que no es así, al contrario si los materiales no son los adecuados y los conocimientos con los que se construye están basados en la experiencia empírica y no en el conocimiento terminan fallando».
Chiapas seguirá temblando
El miedo se ha mantenido entre los chiapanecos; sin embargo, para el especialista no hay nada que temer sino informarse para saber cómo actuar ante estos fenómenos, ya que Chiapas ha sido, es y será una zona sísmica y temblará siempre.
«A partir de este terremoto tenemos que ser una sociedad más informada y hacer las cosas para aprender a vivir en un estado que va a presentar sismos en todo el tiempo que estemos aquí; tratar que en la medida posible, construyamos viviendas fuertes que soporten cualquier movimiento».
