Luego de la Canicula, las tormentas

El presidente del Colegio Mexicano de Profesionales en Gestión de Riesgos y Protección Civil, Capítulo Chiapas, Romeo Palacios Suárez, indicó que no descarta que se vengan lluvias intensas, luego del final de este fenómeno de calor (25 de agosto)

ASICh

[dropcap]E[/dropcap]l presidente del Colegio Mexicano de Profesionales en Gestión de Riesgos y Protección Civil, Capítulo Chiapas, Romeo Palacios Suárez, no descartó que a partir que termine la Canícula, del 25 de este mes, se tengan lluvias intensas convectivas en Tuxtla Gutiérrez que provoquen serios problemas de inundación.
Asimismo, aseguró que no debe de crear preocupación el que el nivel de la presa La Angostura esté bajo, porque se trata sin duda de las políticas de operación llamadas curvas guías, la cual permite manipular las presas que estén un poco vacías para cuando vengan las lluvias fuertes tengan capacidad de control y regulación del flujo y no provocar desastres aguas abajo.
Entrevistado, enfático dijo que desde el punto de vista de la protección civil es positivo que las presas estén poco vacías en estos momentos, lo cual garantiza que ante lluvias prolongadas se pueda tener la capacidad de controlar y proteger aguas abajo, «lo cual tampoco se descarta que pueda presentarse pasando la Canícula».
La Angostura es una de las presas más grandes de México, que actualmente está a la mitad de su capacidad de almacenamiento, debido al fenómeno de sequía, lo que provoca preocupación solo en los directivos de la CFE por el negocio que representa generar energía eléctrica.
«Sin embargo, las presas, además de generar energía, son obras de protección importantes para la seguridad de la población, por lo que en las condiciones que actualmente está La Angostura significa una mayor seguridad en cuanto a aguas abajo, de las poblaciones incluyendo el estado de Tabasco», indicó.
Palacios Suárez anotó que históricamente en Tuxtla Gutiérrez se tiene una precipitación pluvial del orden de mil 200 milímetros, de los cuales durante los meses de mayo a noviembre caen alrededor de 900 milímetros.
«Este año ha sido muy seco por diversas razones, sobre todo lo que dicen los expertos en el tema de que se trata de las tormenta de arena en el desierto del Sahara, lo cual ha impedido que los rayos del sol no incidan tan directamente sobre la superficie del mar El Atlántico, lo que provoca temperaturas bajas y por consiguiente no hay actividad ciclónica de ese lado.
En tanto, por el Pacífico si tenemos actividad ciclónica, pero al día de hoy tenemos un déficit de la media de precipitación pluvial en la Capital de Chiapas, sin embargo, no se descarta en que podamos alcanzarla. Pero, hay un volumen importante de lluvia que de alguna forma se va a precipitar de manera intensa, lo cual no se descarta que sea a partir que termine la canícula», aseveró. ASICh

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