Tubo de ensayo / Rene Delios

¿Realmente cúal es el rumbo político y económico de México?
¿A dónde vamos con tantos conflictos internos, y gobiernos que hacen todo lo necesario para minimizar las consecuencias de su mala administración?
Lo que sucedió en Acapulco es alarmante; sicarios atacaron la sede federal sin el menor temor a morir, por el solo hecho de que detuvieron a su jefe, apodado «el burro», de nombre Freddy del Valle Berdel, mencionado como líder de plaza del remanente del cartel de los Beltrán y cabeza del ya disminuido Cartel Independiente de Acapulco, que se ha ido desperdigando en grupúsculos extorsionadores apodados «La maña», que no perdonan ni a los locatarios de los mercados, en un cobro hormiga que les deja buenos dividendos, pero un miedo profundo en esos porteños que ven –y padecen las consecuencias de- que sus gobiernos no sirven para nada.
En materia económica la nación no está nada boyante como tampoco las entidades del país, cuyas arcas no tienen dinero ni para pagar lo que contrataron y ya está entregado, mientras miles de proveedores se la ven con muchas dificultades para financiar sus negocios, ante esos enormes adeudos que la propia Coparmex acusa rebaza decenas de miles de millones de pesos.
¿Qué sucede?
¿Acaso los ciudadanos no tenemos derecho a saber qué pasa con el varo?
Porque no es privativo de una entidad, sino de todas, indistinto partido en el gobierno, en que proveedores y prestadores de bines y servicios están reclamando sus pagos y en algunas partes se le pagan en parcialidades angustiosas.
Y para colmo tenemos un derroche en trece campañas, doce a gobernador del estado, que renuevan la tercera parte de un país sin recursos, gastando en democracias fingidas y amañadas, cuando no cínicas, con candidatos hablan de prosperidad en dónde no la hay.
¿A qué estamos jugando?
Porque no es un engaño; lo que vivimos a diario desmiente todo triunfalismo. Es como si los políticos practicarán una realidad virtual ante una nación verdaderamente afectada por la inseguridad y la zozobra económica.
De qué hablan en el gobierno federal cuando anuncian inversiones millonarias, en las entidades con gobernadores en la misma frecuencia, cuando ese dinero no se ve.
¡Esa es la verdad!
¿A qué juegan?
Los éxitos de una nación se ven en la calidad de vida de las familias que gobiernan, y las mexicanas están socavadas, en la miseria en las zonas más pobres, y los políticos hablando de una nación que no existe, a la que le estalla todo a balazos en Acapulco o a explosiones en Pajaritos, Veracruz o Cactus Chiapas.
¿De qué México hablan los políticos?
Parodiando a Colosio, cada pater familia ve a México en su propia casa, y la neta que sigue ese lamento, ese reclamo que hizo alguna vez el priísta asesinado en Lomas Taurinas.

Matraz

Mataron al periodista Francisco Pacheco en Taxco.
El primero en lo que va el gobierno entrante de ese estado ahora priista.

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