Tubo de ensayo / Rene Delios

No pasó sin novedad la toma de posesión del nuevo gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat Hinojosa, en medio de bloqueos de la sección 22 que le hizo sentir lo que le aplicó a su padre, en algo innecesario pues esas acciones no gozan de popularidad ni en esa entidad ni en ninguna otra, luego del enorme desprestigio que se ha ganado la CNTE a pulso propio.
El caso de Martín Orozco, nuevo gobernador de Aguascalientes, más gris que brillante, pues todo pasó sin más novedad que la promesa de que si encuentra irregularidades, aplicará la ley, en algo ya visto en otras tomas de posesión que incluye la de Quintana Roo, que no pasó a más de tan blanda, Orozco ya había sido candidato seis años antes y perdió.
Orozco logró unificar a los panistas a su favor y eso podría ser bueno para esa entidad luego de seis años de tirantes política.
El Tercero es Miguel Angel Yunes, que encabezó una campaña de amenazas en contra de Javier Duarte, por corrupto y no se equivocó, aun pese a que sobre la persona del gobernador de Veracruz, pesa una antigua investigación de enriquecimiento inexplicable que fue o dejó de ser parte de la PGR.
Yunes la busco antes, pero se la ganó precisamente Duarte y hubo de esperar seis años como Orozco, de Aguascalientes, para lograr su objetivo.
Es la coincidencia de que ambos, son panistas.
El nuevo gobernador de Aguascalientes es uno de los pocos que no fincó su campaña en amenazas de meter a la cárcel a su antecesor.
Ahora a Yunes, por ejemplo, el pueblo Veracruzano le pide que presente el cómo la va a hacer en seis años para poder sacar del atolladero a esa entidad antes boyante.
Los veracruzanos le reclaman a Yunes que es puro impacto publicitario, como eso de que recuperó una casa de 200 millones de pesos propiedad de Duarte, y que dio la información a la PGR para recuperar 450 millones de pesos aunque no dieron el cómo, esto es, si en realidad fue Yunes, aunque el mandatario en su toma de posesión dijo que después rebelaría cómo ubicó esos dineros.
Alejandro Murat Hinojosa es el priísta que le regresó dicen Oaxaca al PRI.
La cosa es que Gabino Cué no fue el gobernador esperado pues para empezar la CNTE lo dobló y le dio mercedes y privilegios a sus dirigentes.
Estos tres gobernadores de poca monta la verdad llegan a estados difíciles, Oaxaca con una inconformidad resentida, Veracruz con una violencia desenfrenada, y Aguascalientes con una crisis de credibilidad muy seria.
Dirán que hay entidades en que se padecen las tres cosas como Guerrero o Michoacán, pero esas son entidades que ya tienen un año de gobierno y éstos son los nuevos, faltando solo la renovación de uno: Puebla, hasta febrero de 2017, aunque