Al Son del texto / Tina Rodriguez

Tenemos varios pendientes en materia sexual en ésta entidad, como el matrimonio igualitario, que es lo más sencillo dentro de todo lo complicado para la gente del congreso o el gobierno estatal; la adopción por parte de parejas de un mismo sexo, y desde luego el aborto.
Salvo el segundo tema que sí sería visible, en el primero de los casos no hay ley que impida que dos personas de un mismo sexo vivan juntas, y en el tercero, pues debido a su clandestinaje, es difícil de detectar, salvo alguna desgracia por falta de higiene en su práctica.
La nota publicada en 2016 por Cuarto Poder, en que Magdalena Velázquez, representante de la Red por los Derechos Sexuales y reproductivos en el estado, sobre el que unas 600 mujeres mueren cada mes por practica inadecuada y profesional del aborto, no escandalizó a los sectores sociales, y no mereció desmentido tampoco del sector salud.
La indiferencia a ésta situación tremenda es lamentable.
Ahora, luego de las declaraciones presidenciales en torno a la cuestión social del matrimonio igualitario, todo institucionalmente da un giro, y seguramente irán prosperando en cada entidad incluyendo a Chiapas, éste tipo de opciones legales para casarse entre una pareja de un mismo sexo.
Pero existe la resolución para que la Suprema Corte de Justicia de la Nación obligue al Congreso local a reformar las leyes que aún impiden el matrimonio igualitario, esto es que ya no será exclusivo para las personas heterosexuales.
Y es que como el aborto que se practica aun la prohibición legal a voluntad de la gestante, las parejas de un mismo sexo son cada vez más y visibles, esto es que salieron del closet.
La otra es que la sociedad se niega a algo que existe en cada familia; en todas en primero o segundo grado de consanguinidad, hay un o una gay, escondida en su traje natural a veces, clandestina pues, que no deja salir su ser por ese tabú primero de la familia y luego las propias que marginan un derecho a la libertad de expresarse como es.
Ciertamente considero un error embarazarse para abortar; hay tantos métodos de prevención, y abortar es reclamable en una persona mayor; ciertamente se escapan aun algunos anticonceptivos, pero hay lapso en que la mujer se da cuenta de que pasó el periodo y que es tiempo suficiente para resolver el retraso sin caer en lo extremo como el aborto de un feto.
Pero sucede y ese es problema: como es clandestino, se corren los riesgos y estos cuestan según versiones no desmentidas, unas 600 muertes de mujeres al año.
Es cosa muy seria, también hay que verla como es: un problema público.

Compartir:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *