Bloque de Accin de Mujeres Revolucionarias/ Maria de los Ángeles Salto y Olga Tatiana Jimenez Dominguez

En Tuxtla Gutiérrez se conformó el Bloque de Acción de Mujeres Revolucionarias, quienes tenían un ideario político abiertamente feminista

María de los Ángeles Salto / Olga Tatiana Jiménez Domínguez 

El 27 de junio de 1934 se formó en Tuxtla Gutiérrez el Bloque de Acción de Mujeres Revolucionarias. Una de las primeras organizaciones del Estado de Chiapas conformada por mujeres y con un ideario político abiertamente feminista. La organización se encontraba dentro de las filas del Comité Estatal del Partido Nacional Revolucionario (PNR), entre sus objetivos perseguía «el reconocimiento de la participación política de las mujeres chiapanecas, su emancipación moral y la elevación de su nivel cultural». Así lo hacía ver su acta de inauguración: «Nuestra acción se apegará estrictamente a los derroteros sociales que demarque el gobierno del estado y estaremos siempre en la mejor disposición de colaborar con él en todo aquello que concierne a procurar la liberación de la mujer chiapaneca de los prejuicios dogmáticos y sociales»[1].

La asamblea del Bloque puso en vigor sus estatutos el 10 de julio de 1934. La nueva organización quedaba conformada en su mayoría por docentes: la Secretaria General era la profesora Estela Jiménez; la Secretaria del Exterior era la profesora Luz de Cachón Ponce; la Secretaria del Interior Juana María Zepeda; la de Artes, la profesora Dolores García; la tesorera Rebeca Arguello, y la Secretaria de Prensa y Propaganda, la profesora Josefina viuda de Morales [2].

De acuerdo con los estatutos del Bloque, las militantes debían cumplir con una serie de obligaciones que consistían fundamentalmente en participar activamente en las acciones que organizaba la asociación, asistir puntualmente a las juntas, además de desempeñar con eficacia las funciones encomendadas por la misma organización.

Las integrantes de la asociación también contaban con derechos y prerrogativas. Una muy importante, que deja ver la cercanía del Bloque con el gobierno, era la posibilidad de postular a cualquiera de las militantes destacadas para acceder a un puesto público, técnico o administrativo del gobierno local. Este derecho apareció como una encomienda primordial que se reiteraba varias veces en los estatutos del Bloque. Los dirigentes de la organización también cuidaban celosamente que las mujeres pertenecientes a dicho comité, y que ya ocuparan un cargo público, no fueran retiradas de sus puestos.

Otra propuesta del Bloque de Acción de Mujeres Revolucionarias consistía en consolidar y mejorar las conquistas del movimiento obrero. En los estatutos del Comité constantemente se mencionaba la orientación obrera y socialista de la organización, la cual seguramente se expresaba solamente a nivel de discurso, tal como ocurría con otras corporaciones que formaban parte de las ligas del PNR.

En los postulados del Bloque también se mencionaba que las militantes tenían la obligación de orientar en caso de conflictos laborales a otras mujeres trabajadoras ante la oficina de Conciliación y Arbitraje. En este punto en particular se muestra, por primera vez, en los postulados de la organización la inclusión de otras mujeres diferentes a las militantes, lo cual indica una mayor labor politizadora de las mujeres de la asociación.

Para lograr una mayor difusión de su labor, el Bloque se dio a la tarea de fundar comisiones en diversos municipios del estado. La primera de estas delegaciones se fundó en Chiapa de Corzo el 19 de agosto, en el Teatro Universal de esa ciudad.[3]  Asimismo, se estableció un comité en Huixtla, en noviembre de 1934.[4]

El Bloque de Mujeres de Acción Revolucionaria también representó a las mujeres de Chiapas en diferentes congresos, como fue el caso del III Congreso de Obreras y Campesinas que tuvo lugar en la ciudad de Guadalajara, Jalisco, en 1934. En este congreso, las representantes del estado fueron entrevistadas por un diario local, en donde dieron cuenta de los logros obtenidos por el feminismo chiapaneco. Destacaron el derecho al voto que les fue concedido en 1925 y la ocupación de un curul por una mujer, la maestra Florinda Lazos León. También comentaron su sorpresa por la cantidad de iglesias que eran frecuentadas por las mujeres de Guadalajara y explicaron que en Chiapas la Revolución estaba haciendo una labor efectiva en cuanto a la campaña anticlerical.  [5]

Para 1935, el Bloque de Mujeres de Acción Revolucionaria tenía cobertura en diversos municipios del estado. Los comités se encontraban integrados de la siguiente manera: el Comité Municipal de Tonalá estaba presidido por Isabel Torres de Ruiz y fue fundado el 30 de septiembre de 1934; el Comité Municipal de Berriozábal tenía por presidenta a Esperanza Alicia Gutiérrez y fue fundado el 7 de enero de 1935; el de Chenalhó estaba dirigido por Quintina Díaz y se fundó el 2 de diciembre de 1934; en el de Tapachula fungía como presidenta la profesora Ignacia García Soto y fue fundado el 13 de octubre de 1934; el de Palenque se encontraba al mando de Carmen Aguilar R. y se fundó el 2 de octubre de 1934; por último, el Comité de Copainalá, que se fundó el 7 de febrero de 1935, estaba presidido por Jacinta Álvarez.

Una de las principales acciones del Bloque de Acción Revolucionaria era promover la participación de las mujeres chiapanecas en la campaña de desfanatización a favor del movimiento anticlerical. Sin embargo, el impacto del Bloque no se limitó a ello, su intención era consolidar la participación de mujeres de diversos municipios en el proceso de politización que vivían las mujeres de la capital, para extender una conciencia política femenina en gran parte del estado.

En el interior de estos comités se organizaban foros de discusión y programas culturales sabatinos en donde se analizaba la situación en que vivían las mujeres en aquella época; también se realizaban conferencias que promovían los derechos políticos de las mujeres y la posibilidad de ocupar cargos políticos.

El Bloque de Mujeres de Acción Revolucionaria, fue una de las primeras organizaciones que incorporaron las demandas de derechos políticos de las mujeres en Chiapas, lucha que continua hasta nuestros días.

Fuente: Mujeres tuxtlecas: Toma de conciencia y ejercicio de derechos de las mujeres entre 1930-1935, tesis de licenciatura en Historia.

[1] Periódico La Vanguardia, Año VI, No. 270, Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, 8 de Julio de 1934, «Se fundó un Bloque de Mujeres de Acción Revolucionaria».

[2] Estatutos del Bloque de Mujeres de Acción Revolucionaria, «Por la liberación de la mujer», Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, p. 1.

[3] Periódico Liberación, Tomo 145, Año I, No. 5, Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, 26 de agosto de 1934, «Se formó en la ciudad de Chiapa de Corzo el comité municipal de Mujeres de Acción Revolucionaria».

[4]   Periódico Liberación, Tomo 145, Año I, No. 15, Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, 11 de noviembre de 1934, «En Huixtla se fundó el bloque municipal de mujeres revolucionarias».

[5] Periódico Liberación, Tomo 145, Año I, No. 9, Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, 30 de septiembre de 1934, «La mujer chiapaneca va a la vanguardia de las conquistas revolucionarias, regresaron las delegadas del Bloque de Acción Revolucionaria al tercer congreso de Guadalajara».

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