Buscan evitar que mujeres gobiernen principales ciudades de Chiapas

De Sandra de los Santos

Los partidos políticos en Chiapas siguen en resistencia en cumplir con la paridad de género, tan es así que el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) sin ruborizarse impugnó los Lineamientos en Materia de Paridad de Género, que  establecen los principios de paridad de género, alternancia y homogeneidad de las fórmulas y planillas que competirán, es decir, pone las reglas en claro para que los partidos políticos no hagan simulaciones a la hora de presentar sus candidaturas y solo presenten a mujeres en espacios en los que históricamente han perdido o sólo en lugares con menor número de habitantes.

Dentro de los Líneamientos en Materia de Paridad de Género para el proceso electoral 2024, el IEPC, por primera vez, señala que los partidos políticos deben por lo menos postular una mujer en las cinco ciudades con mayor población.

Esta medida afirmativa a favor de la paridad de género efectiva evitaría lo que ha sucedido en pasados procesos electorales en los que las mujeres quedaron relegadas de las candidaturas a las presidencias municipales de las principales ciudades de Chiapas.

En el pasado proceso electoral del 2020-2021 en  Tuxtla Gutiérrez sólo hubo una candidata al igual que en Tapachula y San Cristóbal de las Casas. En Comitán fueron dos mujeres las contendientes. Sólo en Tapachula ganó una mujer. En el caso de las diputaciones locales la historia no fue muy distinta. En los distritos electorales que tienen cabeceras municipales estas ciudades, el número de mujeres candidatas fue escaso. En el distrito local de Tuxtla oriente ni un partido postuló a una mujer.

Los partidos políticos repitieron la fórmula del 2018, en donde tampoco hubo candidatas mujeres en estas ciudades y el resultado fue que solo San Cristóbal de las Casas fue gobernado por una mujer.

El PVEM lo que pretende con esta impugnación es evitar que se les obligue a postular “al menos una mujer” en una de las cinco ciudades más importantes en la entidad.

No es la primera vez que el PVEM hace una impugnación para echar atrás la  paridad de género o alguna acción afirmativa a favor de la participación política de las mujeres. Hay que recordar que fue el partido político que más regidoras hizo renunciar en el 2018, y que hasta perdió un espacio en el Congreso del Estado por hacer renunciar a mujeres a su espacio en la lista plurinominal de las diputaciones locales. No digo que los otros partidos no deseen echar atrás la paridad de género, pero al menos muestran más pudor.

No “encuentran” mujeres los partidos políticos

“En serio, Sandrita, no encuentran mujeres. Están desesperados” me dijo hace unos días un compañero periodista refiriéndose a que los partidos políticos no encuentran mujeres para cumplir con la obligatoriedad de la paridad de género en las postulaciones de los Ayuntamientos en Chiapas.

“¿Cómo no pueden encontrar mujeres en Chiapas en donde el padrón electoral está conformado en su mayoría por mujeres?” le dije solo para ver qué me respondía porque sé perfectamente que lo que me comentaba, desde los ojos de los grupos de poder dentro de los partidos políticos es una realidad que no se puede discutir.

Sin embargo, esa pregunta no es solo la que valdría la pena argumentar, sino varias más: ¿Qué perfil de mujeres están buscando? ¿En dónde no las encuentran? ¿En dónde las están buscando? ¿Qué hicieron antes y qué están haciendo ahora para que esa búsqueda de mujeres sea real y no ficticia? ¿Qué hicieron para impulsar la participación política de las mujeres?

Desde el proceso electoral del 2015, en Chiapas, como en el resto del país, existe la obligatoriedad de la paridad de género lo que significa que los partidos políticos tienen que postular igual número de candidatos hombres que mujeres. El llegar hasta acá en el respeto de los derechos políticos de las mujeres es una lucha que nos ha llevado toda la vida. Pero, la resistencia de los grupos de poder integrados por hombres, ha sido bastante fuerte.

En cada proceso electoral, los partidos políticos buscan la forma de evadir esta obligatoriedad. Imaginación no les hace falta y han hecho de todo. Si el tiempo que dedican a buscar cómo burlas esta nueva forma de gobernar (les guste o no la obligatoriedad de género no se va a ir) lo dedicaran a empoderar a los grupos de mujeres dentro de sus partidos y crear condiciones para que más participen en el proceso electoral no estarían cada tres años en este “predicamento”.

No es cierto que no queramos participar en los procesos electorales, pero las condiciones para  nosotras son más adversas que para los hombres y eso hace que muchas se autodescarten.

Cada proceso electoral es más violento que el anterior, muchas son jefas de familia y el único sustento en su hogar. “Con quién se quedan mis hijos si me pasa algo en la campaña” me dijo una vez una candidata después de haber sufrido una agresión.  Las mujeres tenemos menos patrimonio que los hombres y no es un secreto que para irse a contender se necesitan recursos económicos.

Los hombres han sido históricamente los que han estado en los grupos de poder, y ellos literalmente “ni nos topan”. ¿Cómo van a encontrar mujeres si se han encargado de crear todas las condiciones para desplazarnos? ¿Cómo las van a encontrar, si ni siquiera pueden reconocer los liderazgos que ya existen porque no les da la mirada?

Los grupos de poder buscan mujeres con un determinado perfil, de repente se les puede colar una con un perfil distinto. Para ellos, la mujer candidata ideal es la que tiene sus propios recursos económicos y los pone para la campaña sin pedir nada a cambio;  no tiene una agenda propia y se suma a los intereses del grupo en el poder; la que no va en contra de los postulados que ya existen Pero, también una que tenga tiempo, que sea profesionista y que le sume votos, es decir, quieren un hombre con vulva.

El panorama puesto así se ve poco alentador, pero la obligatoriedad de la paridad de género es un gran avance que hay que defender así como todas las acciones afirmativas que intentan hacer efectiva esa paridad.

Las mujeres somo mayoría en el padrón electoral. No nos olvidemos, cuando vayamos a votar, quiénes no nos quieren en el poder.

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2 comentarios

  1. Soy mujer y no veo se respeten las leyes.
    No solo la paridad de género.
    También la auto adscripción indígena. Soy mujer indígena me siento lista para representar el pueblo que pertenezco. Si tanto pierden que nos de un espacio en representación popular. Que nos den todos los plurinominales a los 12 pueblos y 3 a grupos. Ya bastó de tanto abuso. El poder es del pueblo organizado. No más simulación. No más confrontación en pueblo originarios y mestizos. Vivan la mujeres.

  2. Las mujeres en política deben reaccionar, tenemos organizaciones que las respaldan, instituciones que velan por sus derechos, y hasta hombres que luchan por la igualdad y contra la exclusión, así que herramientas no faltarían. La ley es la ley pero la ciudadanía es quien la ejerce y usufructúa. Vamos compañeras políticas, no se dejen! Si el partido no las apoya, sálganse, voten por sus derechos!

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