La inmunidad sabinista en el gobierno verde
El actual Gobierno de Chiapas tiene constancia de las irregularidades cometidas en la Secretaría de Hacienda durante la administración de Juan Sabines Guerrero y las está solapando, es el mensaje que entre líneas dio el actual secretario de Hacienda, Humberto Pedrero Moreno, durante la conferencia de prensa donde torpemente trató de sacudirse las acusaciones vertidas por decenas de proveedores a quienes el gobierno estatal no les paga desde hace cuatro años.
Entre una serie de excusas y argumentos que no cambiaron en mucho la percepción del problema, Pedrero Moreno terminó reconociendo que la dependencia bajo su cargo está consciente y tiene las pruebas suficientes para hablar de fraudes en los procesos de licitación dentro de la Secretaría de Hacienda estatal, al menos, durante los tres años en que el sabinista Carlos Jair Jiménez Bolaños estuvo a cargo de dicha dependencia.
Textualmente el responsable de las finanzas en la administración de Manuel Velasco Coello habló de facturas con precios alterados o «inflados», adjudicaciones sin procesos de licitación y transacciones al margen de la ley vigente, entre otras tantas anomalías graves señaladas por el propio titular de la Secretaría de Hacienda estatal.
Y el escándalo no es para menos pues, según las cifras expuestas por los proveedores quejosos, tan solo en lo que respecta a este caso, el monto involucrado en estas irregularidades podría ascender a alrededor de 200 millones de pesos adeudados a los manifestantes, y vaya usted a saber cuántos millones de pesos más entregados a particulares bajo las mismas condiciones anómalas.
Aunque lo asumido (intencional o accidentalmente) por Pedrero Moreno tampoco es una práctica desconocida dentro de los mecanismos de corrupción gubernamental, lo que sí resulta serio es que el reconocimiento de las irregularidades vengan del titular de la misma institución sin que hasta el momento se haya hecho un pronunciamiento sobre los responsables directos que permanecen en absoluta impunidad.
Cómodamente el Gobierno de Chiapas, en voz de Humberto Pedrero, ha salido ante medios para denunciar y exponer a los empresarios quejosos, pero por más de tres años ha sido omiso al no hacer lo propio con los exfuncionarios de mediano y alto nivel, como Jiménez Bolaños, a quienes parece habérseles otorgado algún tipo de «inmunidad verde».
Y es que, éste no es la primera irregularidad hacendaria en la que el ex secretario sabinista, Carlos Jair Jiménez Bolaños Cacho, ha sido involucrado. En 2014 la Secretaría de la Función Pública (SFP) filtró información sobre un gasto no comprobado por más 105 millones 565 mil pesos durante su gestión.
Además de la autorización de pagos a empresas constructoras sin contar con la orden correspondiente, pagos a cuatro empresas contratistas, algunas establecidas fuera de Chiapas, y propiedades de exgobernadores, con contratos y anticipos que carecen de las firmas de solicitud y autorización de la Secretaria de Infraestructura. Todo documentado en el propio Periódico Oficial del Estado de Chiapas con fecha del 16 de abril de 2013 y el procedimiento administrativo número 355/DR-A/2013.
Sin embargo, todo lo anterior no ha sido suficiente para iniciar una persecución judicial efectiva contra el ex Secretario de Hacienda y otros tantos funcionarios (50 expedientes en total) que evidentemente hoy cuentan con protección especial por parte del gobierno que encabeza Manuel Velasco Coello y sus «acuerdos políticos», por lo que cada vez se ve complicada la posibilidad de verlos ser llamados por la justicia para rendir cuentas a mediano o corto plazo.
