Poligrafo Politico / Darinel Zacarias

Qué tristes tiene las manos el parado de mi pueblo: dando vueltas a la noria sin jornal y sin historia…
Joaquín Sabina.

¡Diego el Entumido!

Seguro estoy, que podría venir otro sismo con estragos catastróficos a mi gente. Que, el mega concierto que organiza, gestiona y promociona el gárrulo de Diego Valera. La manera tan mezquina y nada decorosa con la que mueve este ignaro congresista no es admirable.
Incauto, petulante y plañidero el imberbe legislador, en su carácter de empleado del pueblo. Nativo según sus raíces, de la llamada Suiza Chiapaneca, lugar privilegiado del cual se llena la boca y del cual presume.
En sus cargos como «servidor» público ningún beneficio, lea bien amable lector, «ningún» programa o proyecto se le recuerda para su gente, si le recuerdan sus chifladeras, sus alcances. La historia no engaña, y él, no es grato en Unión Juárez, las urnas lo dejaron en vergüenza. Le dieron lección de vida. No es querido, nada agradable. El bicho raro.
Muchos agoreros y especuleros cuchichean, si le tengo envidia al señor Diputado Federal. Lo que le tengo es una dosis de ternura. ¡Es que es un mesiánico chiflado!
La fama de su padre, le alcanzó. Le permitió incrustarlo en la teta presupuestal. Primero en las filas del sátrapa y carnicero de Pablo Salazar, su padrino de estudio. De escuela. (Era el pago por aquel spot del vetusto Toño contra Bodegas). Luego lo empotró con el dipsómano de Juan Sabines.
Hoy, en sus «chaquetas» Diego Valera, arenga que él será quien encabece el sonado Frente Ciudadano por México (PAN, PRD y MC, por lo pronto) y casi asegura por las perlas de la virgen, que será nuestro próximo gobernador en Chiapas.
¡No lo permita la virgen! Tener un bagazo de político, de baja catadura. Miope. Amarreta. Que no pudo ganar ni una elección municipal, que va poder salir avante en una elección estatal. Que no olvide que su padre putativo Velasco, lo dejó de ser, al revelarse. Al morder la mano. Manolo, crió un cuervo y al final le quiere sacar los ojos.
Chapulín y camaleón, son patronímicos que le quedan muy pequeños a este lampiño, que ha encontrado en la política su forma de vida. Lagarto que se mueve en marjal. Su función principal es nadar de muertito. Ojo de hormiga. Adulón. Lobo con piel de oveja. Corroñero.
Valera el patrañero, quién no lo conoce, que le crea. ¿Qué me diga, un solo proyecto de beneficio para Unión Juárez? Si, para Unión Juárez, el pueblo del que tanto presume y en el que sin consentimiento de nadie, levantó un blasón para venerar a su patriarca.
Lo más cínico seria que en un día no tardío, él quiera imponer una estatua en la entrada de la Suiza Chiapaneca, como hombre e hijo predilecto. Por lo pronto, sus corifeos y sus alfiles han querido saltar a la palestra, queriendo tapar como los gatos, su bazofia. No se puede defender lo indefendible. Hasta para hacer lodo, debe saber mover su tierra. O como dijo un amigo de oficio ¡Perro que no ladra, rebuzna!
PD1: Son el principio de una nueva era. La luz en el túnel. El big bang. El Génesis de la política gubernamental. A todos elogiaron y de igual manera se auto elogiaron, todo es miel sobre hojuelas. Vienen los tiempos de exaltar los logros y de ocultar los yerros. Serán como los gatos que todo a la tierra y luego al olvido. Sin olores ni colores. Comienza la carrera 2018.
PD2: Se cumple casi un mes del sismo que causó estragos. Ese fenómeno de 8.2 grados que volvió a golpear a cientos de familia en Chiapas y Oaxaca. En Unión Juárez, particularmente siguen en el olvido en la miseria, de estos 39 mil millones de pesos que se anuncia para la trillada «Reconstrucción» sólo Dios sabe, si les tocará algo.
¿Quién dijo que tengo sed?

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