¿Qué es la autonomía reproductiva y cuáles son sus implicaciones?

Se conoce como autonomía reproductiva “la autodeterminación y la capacidad de las mujeres de determinar, su fecundidad y sus decisiones reproductivas –incluido el aborto– así como vivir una vida libre de violencia y una sexualidad plena

Berenice Chavarria Tenorio / Cimac Noticias 

Ciudad de México.- A través de un proyecto de decreto propuesto por la diputada Aleida Alavez Ruiz, de Morena, se busca incluir en la Constitución mexicana el término “autonomía reproductiva” para “dotar de claridad el derecho a decidir libremente sobre el número de hijos o a no tenerlos”. Sin embargo, el término trae consigo un debate: ¿hasta dónde llega la autonomía de los padres?

Comencemos por definir el término “autonomía reproductiva”. La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) la explica como: “la autodeterminación y la capacidad de las mujeres de determinar, su fecundidad y sus decisiones reproductivas –incluido el aborto– así como vivir una vida libre de violencia y una sexualidad plena”.

Al hablar de autonomía reproductiva también se incluye la obligación del Estado de brindar información en materia de planificación familiar y salud reproductiva; además del derecho a estar libre de interferencias en la toma de decisiones reproductivas.

CIMACFoto: César Martínez López

La Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, (CEDAW), también hace referencia a la autonomía y los derechos reproductivos al indicar la capacidad de las mujeres para decidir si quieren o no tener hijos y, en su caso, cuándo, con qué intervalo de tiempo y cuántos hijos tener.

De esta forma, Alavez Ruíz busca que en el párrafo segundo del artículo 4º constitucional se inserte dicho término, considerándolo no sólo para la libertad reproductiva de las mujeres, también para los hombres, quedando de la siguiente forma:

“Toda persona tiene derecho a la autonomía reproductiva, esto es, a decidir de manera libre, responsable, informada y segura, sobre tener hijas e hijos o no, con quién y el número e intervalo entre éstos, a recibir servicios para acceder al más alto nivel de salud sexual y reproductiva, así como la prevención, sanción y reparación del daño por esterilización involuntaria o de cualquier otro método anticonceptivo forzado”.

¿Hasta dónde llega la autonomía reproductiva de los hombres? 

Para Silvia Álvarez Medina, profesora titular de Filosofía del Derecho en la Universidad Autónoma de Madrid, la autonomía reproductiva debe plantearse a través de una mirada contextual entre las asimetrías a las que están expuestas las mujeres y los hombres.

“La construcción de la autonomía reproductiva a través de las opciones que desde el derecho se promuevan o se desincentivan, deberá tener en cuenta el complejo entramado de relaciones que tales opciones reflejan, con especial atención a las repercusiones de género, las necesidades de las y los menores y las consecuencias de justicia”.

En ese sentido, explica la especialista, la asimétrica socialización de hombres y mujeres resulta relevante al hablar de cómo se configuran los derechos reproductivos. Por un lado se basan en las asimetrías biológicas, ya que “aunque hombres y mujeres son agentes reproductivos, con capacidad para procrear, la vida reproductiva de unos y otras es distinta. Es distinto el inicio de su vida reproductiva, es distinto su desarrollo y es distinto también el fin de la vida reproductiva de ambos”.

CIMACFoto

En segundo lugar, se destaca el desarrollo de esterotipos de género en torno a la especificidad reproductiva de las mujeres (madre, cuidadora, reproductora, referente familiar), los cuales condicionan las opciones para la toma de decisiones.

“Los estereotipos patriarcales de la mujer reproductora, por tanto, deben ser claramente identificados y analizados en su contexto para comprender mejor los intereses y las demandas de las mujeres en este ámbito. Las mujeres toman sus decisiones reproductivas teniendo en cuenta no solo las posibilidades de sus respectivos cuerpos, sino la manera en que socialmente se define el cuerpo femenino, su sexualidad y su potencial para la maternidad”.

Teniendo en cuenta lo anterior, las autonomía de las mujeres va cargada de un contexto patriarcal, contrario a las decisiones de los hombres, quienes con el decreto propuesto incluso podrían atentar contra los derechos y necesidades de las y los niños.

En Cimacnoticias daremos seguimiento a dicha iniciativa para analizar de fondo los riesgos e implicaciones que puede tener la posibilidad de otorgar a hombres el derecho a «no ser padres» cuando sus hijos hijas ya han nacido.

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