Dejemos un momento a los partidos políticos y sus cuadros destacados y volteemos a ver a otro lado donde, a disgusto de los románticos, también se hace política: la universidad pública.
El tema obligado del día es el proceso de renovación de la rectoría de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas. Este lunes se cerró la convocatoria y aunque hay otros inscritos, las posibilidades reales se encuentran en cuatro.
Es el propio rector Roberto Domínguez Castellanos que ve con buenos ojos un tercer periodo al frente de la que ya es la segunda mejor universidad pública de Chiapas, dado que sus posibilidades para buscar la dirigencia estatal del Partido Revolucionario Institucional son incipientes.
Es el empresario Rodolfo Calvo Fonseca que se desgasta por construir una imagen pública de académico pero no logra despojarse de su pasado, que si bien no es motivo de vergüenza dado su origen humilde en Venustiano Carranza (ser exitoso en los negocios es algo más que buena voluntad), no lo deja materializar su principal anhelo: ser rector, de donde sea, pero rector. Con todo, siendo secretario general ya conoce, al menos en lo general, las entrañas de la universidad que le roba suspiros.
Es el académico y analista político José Adriano Anaya, quien sin descuidar la Universidad Autónoma de Chiapas, donde es profesor e investigador de tiempo completo, ha logrado abrirse paso en el espectro periodístico del estado. Sus relaciones políticas, que son notorias e importantes, le dan el capital necesario para constituirse en un perfil integral, pues además de tener claro lo que requiere la comunidad universitaria para transitar a la calidad educativa, sabe dónde obtener los recursos para conseguirlo (debilidad señalada en muchos de los perfiles académicos que regularmente se inscriben).
Mientras nos enteramos del desempeño y trayectoria del total de inscritos, ya hay guerra sucia contra Rodolfo Calvo Fonseca y José Adriano Anaya, del primero se insiste en denostarlo —vía whatsapp y de manera anónima— como «lenón», y del segundo se busca poner en duda sus grados académicos. Hay de dos: o es Roberto Domínguez Castellanos o es el rector.
En fin, este lunes se cerró la convocatoria. Los que mencionamos van a competir. A los que consideramos con posibilidades reales de ser designados hay que sumarle el nombre del ínclito Plácido Morales Vázquez, político en activo y académico, quien no es la primera ocasión que muestra su interés por dirigir una institución de educación superior pública en Chiapas.
Ágora
Al gobernador del estado se le ha complicado el pago a proveedores de servicios. Aunque digan que hay finanzas sanas, los que no ven claro cuándo son los que venden bienes y servicios a las áreas de infraestructura y salud.
De las obras mucho se ha dicho, pero en el caso de salud debemos agregar que a la paupérrima situación de muchos nosocomios al interior del estado habría que sumarle lo torpe y abusivos de algunos perfiles que toman decisiones.
Lo peor es que pareciera que el secretario de Salud, Francisco Javier Paniagua, está de acuerdo y se beneficia.
A nuestra redacción llegó la siguiente denuncia. Se trata del desempeño de Susana Gabriela Negrón Rodríguez, subdirectora de Recursos Financieros de la SSA, a quien acusan chantajes y negociaciones en lo «oscurito». Está tan detallada la queja que uno no puede más que considerarla y exponerla para que se hagan las indagatorias necesarias, porque justamente se trata de unas de las áreas más sensibles para los chiapanecos:
«Le cuento: Susana Gabriela Negrón Rodríguez se desempeñó como subdirectora de Finanzas y como Subdirectora de Prestaciones del quebrado Isstech, hasta que fue despedida por el propio Jorge Ross, titular de la dependencia, que al descubrir los malos manejos que tenía, la cesó inmediatamente. A tal grado ha llegado la ambición de Susana Negrón que se atrevió a vender la base de datos de todos los derechohabientes a una empresa afianzadora privada para dar préstamos a los trabajadores con tasas de interés por demás abusivas.
«Susana Negrón siempre argumentó falta de recursos en el Isstech para no otorgar préstamos a los trabajadores, pero en cambio pagaba altos salarios a aviadores y cobraba con avaricia el diezmo a todos los proveedores. No contenta y satisfecha con tanta robadera, hoy día, esto mismo está sucediendo en la Secretaría de Salud en contubernio con Alejandro Humberto González Astudillo, director de Administración y Finanzas de la SSA, y con el propio secretario Paniagua Morgan.»
Los denunciantes (soplones, le llaman algunos funcionarios) deben ser protegidos, porque aunque desde el anonimato señalan irregularidades, la información filtrada puede contribuir a un bien mayor. En este caso no sólo se trata de corrupción e impunidad, sino cómo esa corrupción e impunidad hunden más la esperanza de los menos favorecidos.
Muchas cosas más dicen en estos señalamientos, nos las reservamos para no caer en exageraciones, pero advierten tener pruebas contundentes: documentos, audio y video, de esta funcionaria que se dice protegida de Mario Carlos Culebro Velasco, subsecretario de Gobierno.
Corrillo
ISSTECH: Curiosamente hablando del sector salud, ayer circuló la versión de que Jorge Ross Coello fue arraigado mientras se investigan actos de corrupción…
ASPIRANTE: Son siete los aspirantes a dirigir la Unicach: Rodolfo Calvo Fonseca, José Adriano Anaya, Sandra Moreno Andrade, Jorge Orozco Zuarth, Guilmar Sarmiento Gutiérrez, Plácido Morales Vázquez y Roberto Domínguez Castellanos, quien se inscribió a punto del cierre de la convocatoria.
Contacto:
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